La administración de Donald Trump debe dejar de desplegar a la Guardia Nacional de California en Los Ángeles y devolver el control de las tropas al estado, dictaminó un juez federal el miércoles.
El juez Charles Breyer en San Francisco concedió una orden judicial preliminar solicitada por funcionarios de California que se opusieron a la medida extraordinaria del presidente Trump de utilizar tropas de la Guardia estatal sin la aprobación del gobernador para impulsar la detención de inmigrantes. Sin embargo, también suspendió la decisión hasta el lunes.
California argumentó que las condiciones en Los Ángeles habían cambiado desde que Trump tomó el mando de las tropas y las desplegó en junio. La administración inicialmente convocó a más de 4 mil soldados de la guardia de California, pero ese número había disminuido a varios cientos para finales de octubre, con solo alrededor de 100 tropas permaneciendo en el área de Los Ángeles.

Lee también Juez aprueba apertura de documentos de la investigación del caso Epstein
Pero la administración republicana extendió el despliegue hasta febrero mientras también intentó utilizar a la Guardia de California en Portland, Oregon, como parte de su esfuerzo por enviar al ejército a ciudades gobernadas por demócratas a pesar de la feroz resistencia de alcaldes y gobernadores.
Los abogados del Departamento de Justicia dijeron que la administración todavía necesita a la Guardia en Los Ángeles para ayudar a proteger al personal y la propiedad federal.
La Casa Blanca no ha respondido a un email en que se le pidió su reacción.
Trump tomó el mando de la Guardia Nacional de California tras las protestas por las masivas detenciones de inmigrantes. La convocatoria fue la primera vez en décadas que la guardia nacional de un estado fue activada sin una solicitud de su gobernador y marcó una escalada significativa en los esfuerzos de la administración para llevar a cabo su política de deportación masiva. Las tropas fueron estacionadas fuera de un centro de detención federal en el centro de Los Ángeles donde se reunieron manifestantes y luego enviadas a las calles para proteger a los agentes de inmigración mientras realizaban arrestos.
California demandó, y Breyer emitió una orden de restricción temporal que requería que la administración devolviera el control de los miembros de la Guardia a California. Sin embargo, un panel de la corte de apelaciones suspendió esa decisión.
California argumentó que el presidente estaba utilizando a los miembros de la Guardia como su fuerza policial personal en violación de una ley que limita el uso del ejército en asuntos domésticos.
Lee también EU planea exigir historial de redes sociales a turistas exentos de visa
La administración sostiene que los tribunales no pueden cuestionar la decisión del presidente de que la violencia durante las protestas hacía imposible para él ejecutar las leyes con fuerzas regulares y reflejaba una rebelión, o peligro de rebelión.
En septiembre, Breyer dictaminó después de un juicio que el despliegue violaba la ley. Otros jueces han bloqueado a la administración de desplegar tropas de la Guardia Nacional en Portland, Oregon, y Chicago.
sg/mcc