Río de Janeiro.— El gobierno brasileño decidió ayer reforzar la escolta policial a los candidatos presidenciales del país, luego del atentado que sufrió el jueves Jair Bolsonaro en la ciudad de Juiz de Fora, informaron medios locales.
Según el diario O Globo, el presidente Michel Temer decidió que, de los 80 policías que actualmente están destinados a cuidar a los candidatos, la cifra aumente a 140. Luego del ataque al ultraderechista Bolsonaro, los propios partidos habían pedido más refuerzos.
Tras una reunión en Brasilia, el comando de la Policía Federal (PF) difundió un comunicado en el que se anuncia: “Debido al nivel de alerta provocado por un evento crítico durante la campaña, habrá un aumento del efectivo policial”.
Bolsonaro fue atacado con un cuchillo por un hombre, que fue luego arrestado, en medio de un acto de campaña. El candidato debió ser operado de urgencia para salvar su vida y todavía se encuentra en reposo, presuntamente por al menos una semana más.
De acuerdo con el boletín médico que emitió ayer el hospital de Sao Paulo donde está internado, el ex militar se encuentra “en buenas condiciones clínicas”, pero en sala de cuidados intensivos.
El agresor del candidato, identificado como Adelio Bispo de Oliveira, de 40 años y quien dijo a la policía que actuó “bajo mandato de Dios”, fue transferido a un penal de máxima seguridad en Campo Grande, en el estado de Mato Grosso del Sur.
Allí quedará aislado, en una zona destinada a presos colaboradores de la justicia y reos cuya integridad física está en riesgo, dijeron fuentes del servicio penitenciario al sitio G1.
Flavio Bolsonaro, hijo de Jair, manifestó que su padre no hará más campaña en la calle y que utilizará mucho más las redes sociales. Los demás candidatos reanudaron ayer sus campañas, que suspendieron el jueves tras lo ocurrido; se abstuvieron de nuevos ataques contra las posturas radicales de Bolsonaro y en vez de ello defendieron la tolerancia y una campaña pacífica.
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