Señor Director:
Me refiero a la columna de Roberto Rock, Retrato Hereje, titulada “La hora de Bartlett: 5 preguntas”, publicada el pasado 10 de febrero en EL UNIVERSAL, en la cual señala: “Uno de los personajes recurrentes […] fue el ex director de Administración, Héctor De la Cruz Ostos. Reportes de la Auditoría Superior de la Federación le atribuyeron en 2017 desvíos…”. Sobre el particular, me permito hacer las siguientes precisiones:
Respecto de los casos que se mencionan en la columna, sobre mi gestión como Director Corporativo de Administración (2014-2018), en ningún momento se me atribuyó desvío alguno en detrimento de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Los hallazgos de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y de la Auditoría Interna de la CFE, instancias facultadas para revisar la actuación de los servidores públicos, indican que todas las observaciones fueron debidamente atendidas.
Lo anterior se puede constatar en el Sistema Público de Consulta de Auditorías ASF, disponible en el propio portal de la ASF, en el que se muestra que el estado de trámite de las recomendaciones derivadas de dichas auditorías es de seguimiento concluido.
Más aún, derivado de la auditoría practicada por la ASF al arrendamiento de transporte aéreo, en 2017 se rescindió el contrato, lo que representó un ahorro para la CFE de 24.8 millones de pesos (MDP) y además se evitaron erogaciones adicionales que incrementaban el costo de estos servicios aéreos, ya que los aviones no eran usados con la frecuencia para la que fueron contratados en 2013.
Asimismo, el dictamen final de la ASF sobre la auditoría al arrendamiento de vehículos terrestres indica, entre otras cosas, que la CFE cumplió con las disposiciones legales y normativas aplicables en la materia. Por otra parte, de acuerdo con el análisis de la Auditoría Interna de la CFE, el arrendamiento vehicular generó ahorros por más de 1,419 mdp por concepto de mantenimiento, sustitución de llantas, tenencias y trámites administrativos, en comparación con el esquema de vehículos en propiedad.
Finalmente, le comparto que he sido servidor público durante casi 26 años. En este tiempo, incluida mi gestión como director Corporativo de Administración de la CFE, nunca ha existido ningún proceso administrativo o de cualquier otro tipo en el que se me haya acusado o involucrado con alguna falta administrativa, ni actos irregulares ni mucho menos corrupción. Durante mi carrera en el servicio público mexicano, siempre me he conducido con honradez y en estricto apego a la normatividad vigente.
Mucho agradeceré tenga a bien publicar estas precisiones apelando al derecho de réplica que me asiste constitucionalmente.
Héctor De la Cruz