Luego de la confrontación de este jueves en la Cámara de Diputados , el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) hizo un llamado para que el recinto legislativo de San Lázaro se mantenga como un lugar representativo del respeto a la diversidad y la pluralidad, ya que desde ese espacio legislativo se construye y fortalece el tejido social.
A través de un comunicado, la Conapred señaló que tanto en las discusiones como en los debates, se debe acatar lo que establece el artículo 1 constitucional que obliga a todas las autoridades a prohibir cualquier forma de discriminación motivada por origen étnico o nacional, género, edad y discapacidades, así como condición social o de salud, religión, opiniones, orientaciones sexuales, estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana.
“El Conapred exhorta a que en los ámbitos público y privado se aproveche cualquier oportunidad para reafirmar la promoción y defensa de una cultura sin discriminación, que permita que todas las personas ejerzan sus derechos y libertades”, señaló.
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Ayer, los ánimos se encendieron entre las bancadas del PAN y de Morena luego de que el legislador panista Gabriel Quadri llamó “señor” a la diputada trans Salma Luévano. Ese hecho originó que legisladoras del partido guinda tomaran a tribuna y, a empellones, la legisladora María Clemente hizo que el presidente de la Mesa Directiva en funciones, Santiago Creel, se levantara de su sitio.
El tenso ambiente llegó a tal grado, que el petista Gerardo Fernández Noroña, corrió a calmar los ánimos pidiendo un alto con las manos.
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