Nación

Equinoccio de primavera: recargarse de energía solar, moda del mundo actual, asegura experto de la UNAM

El arqueoastrónomo Jesús Galindo Trejo preciso que este fenómeno no se puede percibir a simple vista

“Las personas se visten de blanco y suben a pirámides, como en Teotihuacan, pero nada tiene que ver con un culto antiguo”, aseguró el especialista. Foto: EL UNIVERSAL
19/03/2024 |19:35
María Cabadas
Reportera de la sección NaciónVer perfil

La idea de que con la entrada de la primavera hay que recargarse de energía solar es una moda del mundo actual, una influencia del “new age”, que impera desde hace algunas décadas, dijo el arqueoastrónomo de la (UNAM), Jesús Galindo Trejo.

“Las personas se visten de blanco y suben a pirámides, como en , pero nada tiene que ver con un culto antiguo”, aseguró.

En ocasión del , que se espera ocurra en el hemisferio sur el miércoles 20 de marzo, a las 3:07 horas, el especialista explicó que ese suceso se asocia con una estación del año donde termina el invierno y la temporada de frío, los días comienzan a ser más largos y cálidos, además de que florecen las plantas.

Newsletter
Recibe en tu correo las noticias más destacadas para viajar, trabajar y vivir en EU

Precisa que ese fenómeno no se puede percibir a simple vista, necesitamos un reloj con suficiente exactitud para detectarlo. Está a mitad de camino entre los extremos por donde pasa el Sol, acotó.

Lee también:

Solsticios y equinoccios: la importancia en la religión y en rituales

En diferentes lugares del mundo solsticios y equinoccios se asocian con una importancia religiosa o ritual, y eso se expresa a través de la orientación de ciertas estructuras arquitectónicas, como las pirámides en Mesoamérica, señaló el también investigador del Instituto de Investigaciones Estéticas.

En México, algunas de ellas, como el templo Las Caritas, en Veracruz; Teopanzolco y Xochicalco, en Morelos; y Chichen Itzá, en Yucatán, fueron alineadas de acuerdo con el equinoccio, pero no es una fecha relevante en el mundo mesoamericano, afirma el científico.

Desde los olmecas hasta los mexicas, los mesoamericanos desarrollaron su propio y varias de sus estructuras arquitectónicas corresponden a ciertos números, periodos de días y fechas que para nosotros no tienen ningún significado, pero la tuvieron en su calendario ritual o religioso. “En nuestras culturas ancestrales existen más de tres mil años de culto al tiempo, no al espacio”, puntualiza.

En las mesoamericanas no fue especialmente esencial el equinoccio de primavera, momento astronómico que en la actualidad se asocia con una recarga de energía del Sol.

Lee también:

“Es un hallazgo de hace algunos años. Antes se pensaba que los monumentos arquitectónicos estaban orientados por solsticios y equinoccios y por la fecha en que el Sol alcanzaba el cenit en un sitio geográfico determinado. Hoy se cree que más bien respondieron a la lógica de su propio calendario”, insistió.

Únete a nuestro canal ¡EL UNIVERSAL ya está en Whatsapp!, desde tu dispositivo móvil entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.

uul/apr

Te recomendamos