Washington.— Dos autopsias reveladas ayer no dejan duda de que la muerte del afroestadounidense George Floyd, chispa que despertó la oleada de protestas contra la brutalidad policial racista en Estados Unidos, fue un homicidio. Dos informes separados, uno de la familia y otro del condado de la ciudad de Minneapolis, coincidieron en que la acción policial fue determinante para el fallecimiento de Floyd, aunque los dos informes difieren en la causa exacta de la muerte.

La autopsia de la familia, realizada por dos médicos independientes, aseguró que la víctima murió por asfixia. No sólo por la presión de la rodilla en su cuello, sino que ayudó que otros dos agentes le aprisionaran la espalda y las piernas para que no se moviera del suelo cuando estaba esposado, desarmado e indefenso.

La conclusión llevó a los familiares a exigir que se aumentara la acusación del único detenido por el caso, el ex agente policial Derek Chauvin, sino que se detuviera y acusara de asesinato también a los otros tres policías despedidos del cuerpo por el suceso, ya que su complicidad fue clave para provocar la muerte a Floyd.

Horas más tarde, el informe de la oficina médica del condado de Hennepin apuntaba a un paro cardiopulmonar como la causa de la muerte, provocada por la “compresión del cuello y restricción” policial. Si bien dejaba explícito que se trataba de un “homicidio”, también apuntaba a que Floyd presentaba síntomas de enfermedades coronarias e hipertensión, y encontraron restos de fentanilo y consumo reciente de metanfetaminas.

Sea como fuera, las dos autopsias tienen conclusiones totalmente diferentes a las del informe presentado el viernes en la denuncia criminal para la detención Chauvin, que apuntaba que el primer examen “reveló que no hubo ninguna prueba que apoyara el diagnóstico de asfixia traumática o estrangulamiento”.

Estados Unidos ya se prepara para los funerales de Floyd. Un primer memorial se realizará este jueves en Minneapolis; después será trasladado a Houston, donde se crió, para su funeral y entierro. El excampeón de boxeo Floyd Mayweather costeará los gastos de los servicios fúnebres de Floyd, luego de que la familia de éste aceptara la oferta. La información la dio a conocer el director ejecutivo de Mayweather Promotions, Leonard Ellerbe, a la cadena ESPN.

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