La suspensión de actividades en varios países, el deterioro económico y la volatilidad cambiaria en 2020 como consecuencia de la pandemia del Covid-19, le costaron a Cemex mil 500 millones de pesos.
En su reporte anual, la cementera reconoció un cargo por deterioro de mil 500 millones de pesos, que no implicó flujos de efectivo, en 2020.
De ese monto, mil 20 millones de pesos correspondieron a un deterioro de crédito mercantil relacionado con el negocio en Estados Unidos y 473 millones por la afectación de activos en desuso en varios países, principalmente de activos de cemento en Estados Unidos, Europa y Centroamérica y El Caribe.
Para enfrentar la pandemia, Cemex implementó un programa de ahorros por 280 millones de pesos.
En México, operó desde el inicio de la pandemia conforme a los lineamientos técnicos establecidos por el gobierno. El 7 de abril de 2020, reanudaron producción y actividades para apoyar a sectores designados como esenciales.