En tema de energías limpias, gobierno se refugia en discurso de corrupción: Coparmex

Las acusaciones del gobierno federal de que existe corrupción en la participación de los privados en la generación de electricidad por energías alternas pretende ocultar en realidad la idea de reconvertir la industria eléctrica en un monopolio público, a pesar de que ello hará más cara la electricidad y emitirá más contaminación, dijo la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) .

En un comunicado, el sindicato patronal “no nos dejemos engañar: el objetivo último de esta política es desplazar la generación de los privados, que es más barata y eficiente, con energía sucia de las centrales de la CFE que funcionan con combustóleo. Las consecuencias serán una energía más cara, que contaminará más, y que requerirá de mayores recursos públicos para subsidiar las tarifas o de incrementar las tarifas cuando no haya recursos para subsidiaras”.

La Coparmex aseguró que el presidente Andrés Manuel López Obrador “se refugia” en las acusaciones de corrupción con el objetivo de justificar un “nuevo desatino” porque ya se quedaron sin argumentos y ahora hacen aseveraciones sin tener pruebas ni iniciar ninguna investigación al respecto.

“Aplaudimos la independencia del Poder Judicial, que al reconocer las graves consecuencias que estas medidas tendrían sobre la competencia y el derecho a un medio ambiente sano, otorgó más de 20 suspensiones en contra de esta maniobra para evitar la incorporación de nuevas centrales de energías limpias y baratas al sistema eléctrico”.

Sin embargo, aún queda pendiente la defensa legal contra la Política de Confiabilidad publicada por la Secretaría de Energía hace unos días, porque tiene el mismo objetivo que el Acuerdo del Cenace, además de que es violatoria de la Constitución, de los tratados internacionales y las leyes del sector eléctrico mexicano.

Al respecto, la International Chamber of Commerce (ICC) México dijo que la pandemia por Covid-19 no debe usarse como una excusa para dar marcha atrás a la conversión a energías renovables y reimpulsar el monopolio de las empresas del Estado del sector energético.

“El golpe lanzado el 29 de abril desde el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) y asestado el 15 de mayo desde la Secretaría de Energía (Sener), tiene sus antecedentes desde la promesa de campaña del actual presidente de rescatar a la CFE y Pemex”, expuso en un comunicado.

Además de que pasa por “una serie de decisiones como la cancelación de la licitación para las redes de transmisión en Baja California y el cambio de las reglas del juego en materia de certificados de energía limpia, que le iban a dar viabilidad financiera a buena parte de los proyectos, al abrir la entrada al mercado a la paraestatal”.

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