La próxima secretaria de Educación, Leticia Ramírez Amaya, es una mujer de izquierda, que siempre tiene una sonrisa para cualquier persona, nunca se le ve de mal humor y desde 2000 ha estado en el círculo cercano del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con una lealtad a toda prueba, la todavía encargada de Atención Ciudadana de la Presidencia, el rostro, la voz y oídos del Mandatario ante cientos de ciudadanos que todos los días buscan una solución a sus problemas o demandas, tiene una historia de más de tres décadas al lado del político tabasqueño.
Cursó dos carreras: licenciada en Educación Primaria por la Benemérita Escuela Nacional de Maestros, de la cual se tituló, y estudió Antropología Social; por 12 años fue maestra “de gis y pizarrón”.
De acuerdo con el Jefe del Ejecutivo federal, fue también líder de la CNTE y del SNTE. Conoció a López Obrador en 1996 cuando era dirigente del PRD, pero su acercamiento a la política fue con Cuauhtémoc Cárdenas.
En 2000, como jefe de Gobierno, López Obrador la nombró encargada de Atención Ciudadana de la administración capitalina, cargo que repitió con Marcelo Ebrard.
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