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Washington.— La pareja Joe Biden y Kamala Harris ya es una realidad. La flamante dupla demócrata para las elecciones presidenciales de Estados Unidos hizo su presentación oficial con un mensaje de oposición brutal a todo lo que representa, hace y dice el presidente Donald Trump, y la promesa de trabajar para recuperar el alma genuina de EU.
La elección de la senadora afroamericana como aspirante a la vicepresidenta despertó la energía del Partido Demócrata, revitalizado con un ticket electoral ampliamente aclamado y que en su primera aparición pública mostró su química y complementariedad. “Estamos listos para empezar a trabajar en la reconstrucción de esta nación”, prometió Biden, y “arreglar el embrollo que el presidente Trump y el vicepresidente [Mike] Pence han creado en casa y fuera en cuatro años de mala gestión y caos”. Entre los temas que centrarán su hipotética administración, dijo, estarán el cambio climático, el sistema sanitario y la recuperación de empleo.
Biden se deshizo en elogios hacia Harris, una mujer “inteligente, dura, experimentada”. “No tengo ninguna duda de que he elegido a la persona correcta para unirse a mí y ser la próxima vicepresidenta de EU”, aseveró.
El aspirante presidencial demócrata aseguró que la senadora, primera mujer negra y asiática-americana en una dupla electoral de este calibre, es y será un ejemplo para las generaciones futuras.
Harris demostró, entre el nerviosismo de la solemnidad del momento, que está dispuesta a enfrentar el reto. “Es un momento de consecuencias reales para EU”, dijo, recordando que en el día de les elecciones está en juego “un mejor futuro” para Estados Unidos. No escatimó en críticas a Trump, un mandatario que desde el primer minuto ya la tachó de “falsa” y “desagradable”.
“Tenemos un presidente que se preocupa más por él mismo que por la gente que lo eligió”, respondió la senadora, en un discurso en el que reafirmó el orgullo de provenir de una familia migrante con raíces en la lucha por la justicia.
“El 3 de noviembre necesitamos más que una victoria. Necesitamos un mandato que pruebe que los últimos años no representan lo que somos ni lo que aspiramos ser”, sentenció. Está en juego, dijo, la “reconstrucción” del país. La presentación fue distópica, en un gimnasio vacío. El público los vio a través de pantallas, por la pandemia.