Teotihuacán, Méx.— Una unidad de transporte público de pasajeros de la Ruta 95 Unión de Taxistas Concesionados y Servicio Colectivo del Valle de Teotihuacán fue incendiada por presuntos extorsionadores que exigen el pago de renta a los operadores para que los dejen trabajar.
Los hechos ocurrieron la mañana de ayer, cuando sujetos armados interceptaron al conductor de una vagoneta al salir de su domicilio para hacer su primer recorrido.
Los supuestos delincuentes obligaron al chofer a trasladar la unidad hasta un camino de terracería, donde le dispararon al vehículo y le rociaron gasolina para prenderle fuego. La combi fue consumida por las llamas en su totalidad.
Los agresores le dijeron al conductor que le quemaron su camioneta por negarse a cumplir con la cuota que le habían pedido.
Los presuntos extorsionadores lo dejaron vivo, apartado de su vivienda hasta que horas más tarde sus familiares lo encontraron sano y salvo.
Esta es la segunda agresión que sufren los conductores de esa línea de transporte en lo que va de este mes.
El pasado 6 de mayo, una vagoneta que circulaba sobre la carretera Texcoco-Lechería, a la altura de San Isidro Atlautenco, en Ecatepec, también fue incendiada, aparentemente por este mismo grupo de extorsionadores.
En la zona oriente del Estado de México es donde se registran más extorsiones de supuestos integrantes de organizaciones delictivas a líderes o conductores de líneas de transporte público.
Las bandas que operan en varios municipios intimidan a los concesionarios con la quema de las unidades para que cumplan con la entrega del dinero que les solicitan, que puede ser de entre 30 a 40 mil pesos mensuales por ruta.
“Tenemos que dar lo que nos piden porque de lo contrario atentan contra nosotros o nuestras familias, y les hacen daño a los usuarios o a los choferes, que son los que están más expuestos a los ataques”, comentó uno de los líderes transportistas.
“Mientras esté en nuestras posibilidades seguiremos pagando las cuotas porque las autoridades no intervienen cuando denunciamos y cuando lo hacemos los delincuentes saben quién lo hizo, lo que quiere decir que los propios policías están coludidos”, expuso otro de los dirigentes.
Las autoridades han detenido a varios integrantes de esas organizaciones, quienes ya han sido sentenciados por esos delitos, pero los líderes transportistas y los choferes aseguran que las extorsiones no han cesado.
El 2 de julio de 2019 fue encontrado sin vida en Otumba el dirigente de la organización Servicios Colectivos Melchor Múzquiz (Secomm), Martín Soto, quien desapareció desde el 17 de junio de ese año.
Otros tres dirigentes de líneas concesionadas del Valle de Teotihuacán han muerto a manos de extorsionadores en los últimos meses.
Israel Martínez, de la Ruta 89, fue asesinado en el centro de Teotihuacán. A Inocencio Pérez, líder de la Ruta 95, quien apenas tenía una semana de haber asumido la dirigencia, también le arrebataron la vida varios sicarios.
Los delincuentes colocaron explosivos que detonaron en las oficinas de la Ruta 35, así como a una camioneta, de la que fueron bajados los usuarios por los responsables del ataque, en represalia porque no cumplirían con los pagos de las extorsiones.
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