.- Colectivos unidos en la #3raBrigadaEstatalDeBúsqueda, localizaron un cementerio clandestino con más de 20 cuerpos, unos calcinados y otros enteros, en la Costa de Hermosillo.
“La fosa común en la que se ha convertido el territorio de Sonora es muy preocupante. Ya habrá descanso para ellos y sus familias”, expresó Ceci Patricia Flores Armenta , líder de las Madres Buscadoras.
La jornada inició a las 6.00 horas de este miércoles 24 de noviembre, en un huerto de naranjos ubicado en la calle 20 sur, del Poblado Miguel Alemán.
Acompañadas por elementos de la Sedena y personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) realizan trabajos de rastreo en el sitio, tras recibir una llamada anónima.
“Nunca nos imaginamos esto”, comentó la líder de las Madres Buscadoras de Sonora.
Colectivos unidos de las Madres Buscadoras de Sonora y Todos Somos Erick Carrillo de Baja California realizan su 3a. Brigada Estatal de Búsqueda del 20 al 27 de noviembre.
El itinerario inició en el sur del estado, el 20 en Huatabampo; 21 en Villa Juárez; 22 en Guaymas; 23 en Hermosillo; 24, Poblado Miguel Alemán; 25, Caborca; 26, Nogales y 27 en San Luis Río Colorado.
En el último reporte, a las 14.00 horas, habían encontrado en la Costa de Hermosillo, 16 fosas clandestinas con más 20 cuerpos, algunos calcinados y otros en osamenta. Aún continúan en el lugar.
Análisis realizados en el Laboratorio de Inteligencia Científica Forense (CIF), de la Fiscalía de Sonora, determinaron que son compuestos químicos y no restos humanos los hallados en el interior de cuatro tambos localizados en la comunidad del Huichaca, el pasado lunes.
Los estudios de Química Forense, hechos por personal de Servicios Periciales en el Laboratorio CIF, concluyeron que se trata de un compuesto desecante neutralizante que fue utilizado en una mezcla de hidrocarburos presentes en combustibles con aditivos de plomo.
El pasado 22 de noviembre un colectivo de madres buscadoras localizó tres tambos de plástico, todos azules, con capacidad de 200 litros, un recipiente más fue localizado enterrado por personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJE) al procesar el área.
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Al material localizado en el interior de los tambos se le realizaron análisis fisicoquímicos, por espectrofotometría de luz infrarroja, por microscopia electrónica de barrido, cromatografía de líquidos y cromatografía de gases.
Tras las minuciosas pruebas se pudieron hallar componentes químicos y ningún resto de procedencia humana.
La Fiscalía del Estado dará vista a la Procuraduría de Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para el análisis correspondiente del caso.
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El día del hallazgo, las Madres Buscadoras de Sonora , informaron que los tambos podrían tener cuerpos desintegrados con químicos y que esperaban los resultados de los análisis de peritos de la Fiscalía.
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