Rogelio Ontíveros, un experto en tener contentos a los tenistas

La zona más exclusiva del complejo del Abierto de Los Cabos es el lugar donde se guardan los secretos de los jugadores, y no precisamente es la cancha. Se trata del hospitality lounge, que está liderada por un mexicano.

“En mi área, el mayor reto es que los jugadores se vayan con una experiencia agradable [a la cancha], que estén contentos [antes de sus partidos]”, explicó Rogelio Ontiveros a EL UNIVERSAL Deportes.

Es el coordinador de los servicios al jugador del torneo donde Telcel y OPPO son patrocinadores, en el primero de tres años de este acuerdo. Él tiene que cumplir al pie de la letra con todo lo que pide la ATP para que los tenistas se sientan “en un mini hotel de cinco estrellas.

“Coordinamos como si fuera un hotel; es decir, alimentos, transportes, servicios directos, como las cortesías que tienen, el gimnasio y el área recreativa”, comentó.

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Rogelio está viviendo su cuarto año en ese puesto en Los Cabos, aunque cuenta con una larga experiencia cumpliendo los parámetros que indica la ATP.

“Tengo 11 años desarrollándolo. Hago Acapulco, Los Cabos, León y a nivel internacional hago un WTA en Cleveland”, detalló.

Con la vivencia fuera del país, asegura que “en México hacemos las cosas muy bien, tenemos la mejor hospitalidad”.

Asimismo, sabe que —más allá de los puntos a cumplir por la Asociación de Tenistas Profesionales— debe generar un ambiente de tranquilidad, porque ahí viven la transformación pre y post partido.

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“Esta zona no sólo es para comer y prepararse, tienen una distracción, como juegos de mesa, área de juegos [basquetbol y ping pong]... Es un área donde pueden convivir con sus invitados y desestresarse”, explicó Roy.

Ontiveros y su equipo de seis personas son los primeros en entrar al complejo (8:00 de la mañana), donde se realiza el Abierto de Los Cabos, y serán los últimos en partir el sábado 5 de agosto, cuando concluya el certamen. Esto vale la pena, cuando los tenistas se acercan a despedirse.

“Hay jugadores que te dan las gracias cuando se van, y el trato con este nivel de tenistas es una gran experiencia”, sentenció.

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