"Atención importante: Ojo con la comercialización del escándalo", fue la advertencia que dejó Nicanor Parra por escrito a su hija Colombina en un cuaderno con indicaciones sobre cómo actuar luego de su muerte. Si la intención del antipoeta era que la repartición de la herencia se hiciera de manera discreta y sin polémicas, estuvo equivocado. Desde su muerte, el pasado 23 de enero, algunos de sus seis herederos han acaparado los titulares disputándose los bienes de Nicanor.
"Ojalá que no tuviera que gastarse una fortuna en abogados y que terminemos con esto en un show terrible. Son seis hermanos y diferentes ramas de la familia, va a ser delicada la tarea", presagió Isabel Soler en una entrevista que dio junto a su madre Catalina Parra a la Revista Ya, el pasado 30 de enero.
Para entonces aún nada sabían de las últimas voluntades de Parra. Su primogénita Catalina acusó a sus hermanos Juan de Dios, Colombina y a su sobrino Cristóbal "Tololo" Ugarte de haber vivido a costa de Nicanor. "Son hippies y punk y rockers y toda esa cosa anti-establishment. Son anti el trabajo de nueve a cinco", declaró en la misma publicación.
La entrevista no cayó nada bien entre el otro "bando" de los Parra. "Esas declaraciones de personas que llegan después de 40 años a hablar de que conocieron a mi abuelo me parecen ridículas", declaró "Tololo" en respuesta a los dichos de su tía Catalina y su prima Isabel.
La disputa se libró definitvamente cuando se hizo pública la última voluntad del antipoeta. Su hija menor, Colombina Parra, no solamente era nombrada la albacea de sus bienes, sino que además, recibiría el 58% de la herencia. Convirtiéndose así, en la heredera mayoritaria.
En este punto es que la familia se dividió definitivamente en dos bandos. El conformado por Alberto, Catalina y su hija Isabel; y el conformado por Juan de Dios, Colombina y su hijo "Tololo".
Cabe recordar que Nicanor tuvo seis hijos. Con su primera mujer, Delia Troncoso, tuvo a Catalina, Ana y Alberto. Con la segunda, Rosa Tila Muñoz, nació Ricardo. Y con la última, Nury Tuca, dieron vida a Colombina y Juan de Dios.
Según lo estipula la legislación chilena, el 50% de los bienes del escritor se repartió entre los seis en partes iguales. Luego, Colombina además fue nombrada acreedora de la cuarta de mejoras y de la cuarta de libre disposición.
Catalina y Alberto buscan impugnar el documento, insinuando que Colombina habría hecho un testamento a su medida. Los argumentos esbozados por la firma que los defiende, el estudio Grasty Quintana Maljis, son que existen "grandes dudas sobre la salud mental de Parra al momento de efectuar su testamento (4 de septiembre de 2017)".
El antipoeta dejó, a la hora de su muerte, un patrimonio que incluye propiedades en Isla Negra, Huechuraba, Las Cruces y La Reina. Conservaba terrenos en Peñalolén, según informó La Tercera. Igual o más valiosos son los derechos de autor, que son administrados por la agencia española Carmen Balcells.
Ante la ofensiva del bando liderado por Catalina, "Tololo" defendió a su madre como heredera mayoritaria del patrimonio. "Con esto se va a cumplir la voluntad de mi abuelo (...) No se trata de divisiones, se trata de conservar al menos las propiedades de La Reina y Las Cruces para hacerlas monumento", dijo a La Segunda.
"Si dividiéramos todo en seis, lo que ocurriría es que perderíamos la posibilidad de salvaguardar las dos propiedades más importantes", aclaró el nieto de Nicanor. "Dejando esas dos casas a un lado, el resto de los bienes sí se dividirá en partes iguales".
Ugarte arroja otra bomba al referirse a una desconocida propiedad de Parra en Nueva York. "Catalina no vive ahí pero cuenta con ese arriendo para vivir. Ninguno de sus hermanos recibió una parte de ese arriendo, tampoco se le pidió. Pero ha llegado el momento de regularizar ese tipo de cosas".