De ligero, pero agradable sabor, la espinaca se puede comer cruda, ya sea sola con unas gotitas de jugo de limón y sal, en ensaladas y en batidos, para este fin las tiernas son las perfectas. También cocida es deliciosa en guarniciones, sopas, cremas y en platos principales.

Combina muy bien con lácteos, en especial con el queso parmesano, pastas, arroz, carne de pollo y con otras hortalizas. Se puede mezclar con aceite de oliva, jugo de limón, sal, pimienta, ajonjolí, nueces, pasas y nuez moscada, entre otros ingredientes afines a esta suave, deliciosa y jugosa hoja.

Según expertos en cocina, cuando se compra espinaca , se debe calcular 250 grados por persona, ya que pierde volumen al cocinarla.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses