Las 381 mil 738 armas destruidas en esta administración, de las que sólo 26 mil 440 fueron decomisadas en la segunda quincena de octubre, y que están relacionadas con algún ilícito, no volverán a las calles o a manos de delincuentes, dijo Dagoberto Espinosa Rodríguez, comandante de la Primera Región Militar.
Durante la ceremonia de destrucción de armas de fuego y juguetes bélicos que realizó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en el Campo Militar número 1-A, en la Ciudad de México, afirmó que se destruyeron 3 mil 642 armas, de las de 26 mil 440 decomisadas en Hidalgo, Morelos y la Ciudad de México.
Entre las principales armas que fueron aseguradas había de calibre 5.7, llamadas matapolicías, escuadras, ametralladoras, subametralladoras, Barret y calibre 50.
La destrucción de este armamento que jamás volverá a estar en las calles, en manos de quienes dañan a nuestra sociedad, constituye un objetivo alcanzado y a la vez un logro de las autoridades civiles y militares, quienes han venido trabajando de manera conjunta”, expresó Espinosa Rodríguez.
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