La casa de "" se ha convertido en un ícono cinematográfico, inmortalizada en la memoria de millones de espectadores como el escenario donde Kevin McCallister lleva a cabo su ingenioso plan para defenderse de dos torpes ladrones durante la Navidad. Sin embargo, detrás de las cámaras, la historia de esta casa en Winnetka, Illinois, tiene sus propias curiosidades y anécdotas fascinantes.

La dirección exacta de la famosa es 671 Lincoln Ave, y hoy en día es un destino recomendado en Tripadvisor para aquellos que desean revivir la nostalgia del clásico navideño. Aunque solo es posible admirarla desde el exterior, la visita vale la pena para los fanáticos de la película.

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Chris Columbus, el director de "Mi Pobre Angelito", tenía una visión clara al seleccionar esta casa para la película. Quería una vivienda que no solo fuera visualmente atractiva, sino también funcional para las acrobacias y escenas de la trama. La mansión de Winnetka cumplió con estos requisitos y se convirtió en el escenario perfecto para las escenas exteriores, la sala de estar y la imponente escalera del vestíbulo.

A pesar de su prominencia en pantalla, las tomas interiores de la casa no fueron filmadas en su totalidad en la residencia de Winnetka. Una escuela abandonada en la ciudad sirvió como escenario para el resto de las escenas interiores, donde se construyó un edificio de dos pisos para recrear el interior del hogar de los McCallister.

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¿Por qué la familia no se fue de la casa durante la filmación de "Mi Pobre Angelito"?

La historia detrás de la ocupación de la casa durante el rodaje es tan singular como la película misma. La familia Abendshien, que residía en la casa en ese momento, se convirtió en parte de la producción de manera inesperada. Inicialmente, se alojaron en un departamento alquilado, pero pronto decidieron regresar y compartir su hogar con el equipo de filmación. Durmieron en la suite principal del segundo piso durante los cuatro meses de rodaje.

La relación entre los Abendshien y la película llegó a su fin en 2012, cuando decidieron vender la casa por 1.585 millones de dólares. Hoy en día, Zillow estima su valor en alrededor de 2.3 millones, mientras que Realtor.com sugiere que oscila alrededor de 1.942 millones.

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