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“Niñito Dios, te pido muchos juguetes y mi corazón”, solicitó Dafne Verónica García Guzmán para esta Navidad, y su deseo le fue concedido antes de tiempo.
La pequeña de cuatro años, que en septiembre pasado se convirtió en la primera menor en recibir un corazón artificial en el país ya se recupera del trasplante de un corazón de verdad que le realizaron hace siete días.
En el mes de julio, Dafne llegó al Hospital Infantil de México Federico Gómez con falla cardíaca progresiva causada por una miocardiopatía restrictiva, por esta razón los médicos le tuvieron que colocar un apoyo ventricular externo (Excor), lo que significó un hito histórico en la pediatría nacional porque nunca antes se había colocado un “corazón artificial” a un niño en toda la república.
Maricela Guzmán Colunga, madre de la paciente recordó que su hija inició con problemas de salud en octubre de 2015 después de que padeciera un severo cuadro de fiebre que se agravó hasta causarle un derrame cerebral a su hija quien estuvo internada en hospitales de Aguascalientes y Guadalajara, meses después llegaría a la ciudad de México.
La falla cardíaca de Dafne repercutía en otros órganos, principalmente en el hígado y riñones, esta situación aumentaba el riesgo de trasplante, por eso los especialistas optaron por el apoyo ventricular.
Alejandro Bolio, jefe del departamento de cirugía cardiovascular, explicó que el aparato Excor es un dispositivo de asistencia ventricular que ayudaba al corazón a bombear de forma mecánica la sangre. Cuenta con dos bombas que simulan los ventrículos derecho e izquierdo, que son conectadas a las arterias a través de unas mangueras.
El especialista subrayó que este implante temporal permite retirar a la paciente los fármacos de apoyo al corazón, observar mejorías en la función renal y estado nutricional, lo que dará mejores resultados durante la cirugía de trasplante de corazón.
El 12 de diciembre, la mamá de Dafne se enteró de que había un corazón disponible; los familiares de un menor de 5 años quien falleció víctima de un tumor cerebral acordaron donar el órgano, horas más tarde realizaron la cirugía que duró aproximadamente seis horas.
“No quiero que me quiten mis bombitas” dijo Dafne antes de entrar a quirófano, pero Maricela Guzmán le explicó que ahora ya tendría un corazón de verdad y eso la dejó más tranquila.
Al día de hoy la niña presenta una favorable evolución postoperatoria y se estima que dentro de 10 o 12 días será dada de alta; por lo pronto se le administran inmunosupresores, los cuales sirven para evitar infección y rechazo del órgano.
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