La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) consideró que la política de contención que aplica el Instituto Nacional de Migración (INM) ha ocasionado que los migrantes busquen nuevas rutas, ante el incremento en operativos de control y la decisión de impedir que aborden el tren en el que buscan atravesar el país.

En consecuencia, dijo, los flujos migratorios se han desviado hacia cruces clandestinos utilizados por el crimen organizado para el tráfico de drogas, armas y personas, lo que ha expuesto a mayores riesgos a las personas migrantes.

El organismo informó que, por conducto de la Dirección General de Atención a Migrantes y oficinas foráneas, ha logrado mayor acercamiento con los grupos de la sociedad civil con objeto de documentar dicha situación, integrar las quejas correspondientes y elaborar un diagnóstico encaminado a recomendar cambios a la política de contención, bajo un parámetro de respeto a los derechos humanos.

También, comentó que ha incrementado la supervisión a las estaciones y estancias migratorias, donde en ocasiones se rebasa la capacidad que les permite la normatividad para el alojamiento de migrantes, ocasionando deficiente atención en aspectos básicos como alimentación, servicios médicos e incluso orientación jurídica.

“Se ha puesto especial énfasis en lo referente al alojamiento apropiado para la unidad familiar”, afirmó.

En cuanto a la falta de denuncias de violaciones a derechos humanos de los migrantes, “la CNDH les informa de los beneficios que pueden obtener por la denuncia o la realización de su testimonio, ofreciéndoles acompañamiento debido a para la realización de tal acto, con la finalidad de que esos ilícitos sean investigados y no queden impunes”, subrayó.

El organismo informó que el grave problema que representa el arresto de migrantes por la frontera sur del país, quienes están expuestos a los delitos de trata y tráfico ilegal de personas, será abordado durante la Reunión de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos de México y Centroamérica, donde se analizará la política sobre el tema del gobierno mexicano.

Los ómbudsman de Belice, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, integrantes de la Federación Iberoamericana del Ombudsman (FIO), se encuentran en Tapachula, Chiapas, en donde desarrollarán una agenda de trabajo para adentrarse en los problemas migratorios, que incluye mesas de discusión y reuniones con autoridades federales y estatales. El acto inaugural será encabezado por Luis Raúl González Pérez, presidente de la CNDH, y por Manuel María Páez Monges, de la FIO.

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