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Después de homologar el salario mínimo en todo el país, lo que sigue es formalizar el empleo, 75% de la Población Económicamente Activa (PEA) tiene un ingreso determinado a partir del salario mínimo y la mayoría son informales, aseguró en entrevista con EL UNIVERSAL Alfonso Navarrete, secretario del Trabajo y Previsión Social.

Casi 39.5 millones de mexicanos son víctimas de una doble injusticia. “Por un lado, el salario tal como está, aun siendo insuficiente, no lo tienen a su alcance y por el otro lado, ni siquiera son trabajadores formales que tengan prestaciones y seguridad social”.

Navarrete Prida reconoció que 70 pesos con 10 centavos al día son insuficientes para sostener a una familia promedio, pero unificar al país en una sola zona económica es un hecho importante de justicia social, puntualizó.

“Por primera vez en 40 años, empezamos a recuperar el poder adquisitivo en México. Logramos un acuerdo unánime con los trabajadores y patrones, sin generar inflación”.

El aumento en la productividad y en el valor del producto final, indicó, son el binomio maestro para incrementar el salario mínimo. Para eso, la estabilidad macroeconómica es indispensable. “Se debe contar con finanzas públicas sanas, una deuda etiquetada y programada e ingresos diversificados. Así, desde el pequeño empresario hasta la gran fábrica podrán mejorar los sueldos”.

A pregunta expresa sobre la eficacia de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) y de su presidente, Basilio González, quien ha permanecido al frente por más de 24 años con un sueldo bruto muy por encima del salario mínimo, casi 3 millones de pesos al año, el funcionario señaló:

“La Conasami ha tenido muchas ataduras. Hay que dotarla de nuevas herramientas para que funcione bien. Es un órgano que sí es independiente, porque sólo tiene un representante del gobierno y que sí da resultados, porque sus resoluciones se toman por unanimidad. Hemos analizado otras alternativas que no considero mejores. Creo que hay que darle una oportunidad con nuevos instrumentos”.

Sobre el sueldo del presidente de la Comisión respondió: “Yo no querría enfrascarme en un asunto del salario del funcionario. Basilio González tiene legitimidad. Ha tenido la capacidad para orientar a los factores de la producción hacia resultados concretos, en la medida en que las leyes, las herramientas técnicas y la economía se lo han permitido en estos veintitantos años”.

El secretario del Trabajo comentó: “Creo que es muy legítimo y entendible el disgusto social frente a la pérdida del poder adquisitivo de 74.5% en 30 años, pero esto no obedece a la Conasami, esto obedece al mercado, a la economía real, a un país que vinculó el salario mínimo a cosas que no tenían que ver con él, y anclándolo a la inflación y a una mala experiencia que duró casi dos décadas, donde el salario mínimo se fijó por decreto. Por esto, los salarios subían por la escalera y los precios de los productos por el elevador”.

Navarrete Prida afirmó que las metas se están cumpliendo: dos años sin huelgas laborales, la unificación de zonas económicas, más empleos y menos trabajo infantil. Lo que falta es la recuperación real del poder adquisitivo.

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