/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/eluniversal/R22I5T6QTBD4DGONIG66FGBNN4.jpg)
/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/eluniversal/XPLJRGMMVZDSTLO4K4OHA6CZQM.jpeg)
/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/eluniversal/INJ6KZI53ZBQ3AEFPI27BXQOLQ.jpg)
/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/eluniversal/F5CBIJUP5RENBO7IWPINU4CHEA.jpg)
Un líder de alto nivel de Estado Islámico murió en un supuesto ataque con un drone, utilizados en una campaña liderada por Estados Unidos contra militantes del grupo de línea dura, en su bastión sirio de Raqqa, informó el miércoles el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos.
El ataque causó la muerte de un líder uzbeko del EI involucrado en la seguridad mientras estaba sentado en un coche afuera de un hotel del centro de la ciudad, dijo el grupo de monitorización.
El Estado Islámico ha atraído a combatientes extranjeros de todo el mundo para combatir en su autodeclarado califato en partes de Siria e Irak. Nombró a Raqqa como su capital de facto.
Estados Unidos dice que ha intensificado su campaña aérea contra Estado Islámico en Siria con una ola de ataques en la ciudad de Raqqa y sus alrededores.
El Secretario de Defensa de Estados Unidos, Ash Carter, dijo el lunes que fuertes bombardeos durante el fin de semana, que también destruyeron puentes sobre canales en la ciudad bordeada en el sur por el río Éufrates, buscaban erosionar aún más la capacidad de los militantes.
