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emilio.fernandez@eluniversal.com.mx
Nezahualcóyotl, Méx.— De mayo a la fecha se registran 260 indocumentados hallados en municipios del Estado de México en su intento por llegar a territorio estadounidense.
El 6 de mayo, en Axapusco, fueron liberados 103 ilegales que estaban cautivos en una casa de seguridad, algunos de ellos eran originarios de la India y Sri Lanka.
El 9 de julio la Policía Municipal de Texcoco encontró sobre la carretera Texcoco-Lechería a 53 centroamericanos que fueron abandonados por varios “polleros”.
El 30 de julio, en una casa de huéspedes de Ecatepec, elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, encontraron a 91 indocumentados que pretendían llegar a Estados Unidos.
Nunca regresaron. Un grupo de 13 inmigrantes guatemaltecos, entre ellos dos mujeres —una de ellas menor de edad— fueron encontrados en un hotel de la avenida Texcoco y Calle 19, en la colonia Vicente Villada, por elementos de la Policía Municipal, luego de que fueran abandonados por los “polleros” que los trasladarían a la frontera norte del país, para ingresar después de manera ilegal a Estados Unidos. El director de Seguridad Pública de Nezahualcóyotl, Jorge Amador Amador, informó que ayer, durante un recorrido de rutina de la Policía Municipal, los uniformados localizaron a las 13 personas que estaban afuera de un hotel del municipio.
Los miembros de la corporación se acercaron para interrogarlos y se dieron cuenta que habían sido víctimas de sujetos que, presuntamente, se dedican al tráfico de personas.
Según los centroamericanos, el hombre que los trasladaría a la frontera norte les dijo que se alojaran en un cuarto de hotel y que volvería por ellos más tarde, pero ya no regresó.
El titular de la corporación local dijo que luego de las entrevistas a las víctimas y de comprobar que no eran mexicanos, que estaban en estado de indefensión al no tener dinero ni comida, ni conocer a nadie, las autoridades municipales les brindaron apoyo.
Les ofrecieron alimentos y bebidas, se les permitió hacer llamadas telefónicas para contactar a sus familiares y amigos y posteriormente se contactó al Instituto Nacional de Migración (INM) para que su personal determinará su situación legal.
“Cruzaron la frontera sur de México por Chiapas, después pasaron por Puebla e iban a ser llevados a otro estado del norte del país para que después intentarán ingresar a Estados Unidos, sin embargo, luego de pagar un anticipo a los presuntos traficantes de personas, quienes les realizarían un cobro final de alrededor de 2 mil 500 dólares”, explicó Jorge Amador.
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