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Una investigación de tres semanas encabezada por la Procuraduría capitalina, con la que se pretendía desmantelar una banda organizada que se dedica al robo de tráileres, mercancía y a la extorsión de los propietarios de la Central de Abasto (Ceda), terminó con la muerte de un comandante de la Policía de Investigación y un oficial herido de la misma dependencia.

El operativo para detener a tres integrantes de la banda de Los Oaxacos se organizó desde la noche del miércoles; el comandante de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), Ezequiel Rivera Lerma, y el agente Alejandro Martínez Rivera estaban encubiertos y tenían la información de que a las 6:00 horas pasarían a recoger el botín de una extorsión contra un comerciante.

Todo iba conforme a lo planeado, pues capturaron en flagrancia a dos de los involucrados; sin embargo, narraron en el anonimato policías, fueron sorprendidos por un tercer integrante de la banda que con pistola en mano abrió fuego en contra de los elementos de la Procuraduría capitalina para rescatar a sus cómplices.

El saldo fue de un comandante muerto y un policía lesionado en el pasillo S, bodega 63, con razón social Grupo Corporativo CGR; también detuvieron a una persona y aseguraron una pistola calibre .22. Las autoridades refirieron que dos presuntos delincuentes —entre ellos quien mató y lesionó a los agentes—se dieron a la fuga en un automóvil Ibiza de color gris.

El incidente tuvo lugar poco después de las 6:00 horas, donde aparentemente se cobraría la extorsión, por lo que los oficiales asignados al caso ya esperaban a los presuntos delincuentes, a quienes de inmediato detuvieron; pero al no pedir el apoyo necesario fueron sorprendidos por un tercer sujeto.

El oficial herido fue trasladado en un helicóptero al Hospital Mocel donde se reporta grave, pero fuera de peligro, mientras que en los alrededores se implementó el “Operativo Espiral” en busca de los delincuentes, que además contó con el apoyo de las cámaras de videovigilancia .

El jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, informó que el dispositivo de seguridad en la Ceda se realizó debido a que se había ubicado a un grupo que se dedicaba a robar en la zona.

“Lo que se estaba haciendo era un operativo para combatir esta banda, de la cual hay algunos avances sustanciales, pero al estar efectuando la detención hubo un ataque sorpresivo. Tenemos un detenido que es el que está aportando información ahora”, explicó el mandatario.

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF), el operativo iba dirigido contra la banda de Los Oaxacos.

Entrevistado luego de asistir a una jornada de El Médico en Tu Casa en la delegación Xochimilco, el jefe de gobierno dijo que el operativo que se hacía en la Ceda busca garantizar la seguridad del lugar.

—¿Está garantizada la seguridad en ese centro de trabajo?

—Sí, claro, era por eso. El operativo que se desarrolló fue porque ya teníamos la recurrencia de estos señores que se dedicaban a asaltar en la zona.

A través de su cuenta de Twitter, Mancera lamentó la muerte del comandante Ezequiel Rivera. “La CDMX reconoce su entrega y valor en el cumplimiento de su deber #mm (sic)”, escribió el mandatario.

El director de la Ceda, Julio Serna, también lamentó el deceso y dijo que le brindarían todo el apoyo al elemento que resultó lesionado de bala.

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