Un ciudadano mexicano que fue deportado de Estados Unidos a la ciudad de Tijuana se lanzó de un puente para quitarse la vida.

Un funcionario cercano al caso aseguró que era la tercera vez que lo deportaban.

A un costado de su cuerpo inerte, justo detrás de su cabeza, quedó la bolsa de plástico transparente que otorgan las autoridades estadounidenses con un cambio de ropa y comida para sobrevivir al trayecto de regreso a México.

La Procuraduría General de Justicia de Baja California informó que autoridades federales que resguardan el cruce internacional detallaron que el hecho su suscitó a las 9:55 de la mañana de este martes y su cadáver fue localizado justo a un costado de la puerta por donde el Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos expulsa a los mexicanos que no tienen papeles para residir legalmente en su país.

El incidente ocurrió en el puente El Chaparral, uno de los que conforma la red de plataformas y caminos que parten de la garita internacional para ingresar a México.

El hombre se lanzó y sobrevivió, por lo que fue trasladado al hospital general en estado grave. Minutos después lo declararon sin vida.

Jorge Álvarez, subprocurador de la fiscalía en Tijuana, explicó que todo parece indicar que se trató de un suicidio y detalló que a un lado del cuerpo se encontró una bolsa con pertenencias que generalmente son utilizadas por las autoridades estadounidenses para guardar las cosas de una persona que fue deportada a México.

Por su parte, el secretario de Seguridad Pública de Tijuana, Marco Antonio Sotomayor, confirmó que el hombre sí se aventó del puente.

En la bolsa que el Servicio de Inmigración y Aduanas de EU entregó al hombre estaba escrito el nombre: Guadalupe Olivas Valencia, de 44 años y nativo de Sinaloa.

Las autoridades continúan recabando información para establecer de dónde venía Guadalupe Olivas, de dónde era originario y por qué se encontraba en la ciudad de Tijuana.

Deportaciones

Durante 2016 la administración del presidente Barack Obama repatrió a 219 mil 932 personas, según la Unidad de Políticas Migratorias. De éstos, 63 mil 984 fueron deportados por Baja California, lo que representa 29% del total de personas que fueron repatriadas.

Sólo 4 mil 953 eran originarias de Baja California y el resto provenía de otros estados. De este total, 4 mil 330 eran hombres y sólo 623 mujeres.

Actualmente existe mucha incertidumbre en la población migrante que vive Estados Unidos por las amenazas del presidente Donald Trump y sus políticas de deportaciones masivas, por lo que prevén que las ciudades fronterizas sean las más afectadas.

Sergio Tamai, fundador del Hotel del Migrante, advierte que de suceder esto “se registrarían problemas sin precedentes en Baja California” y es que las autoridades “han dejado solos a los activistas en los últimos años”, dice.

Con información de AFP

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