Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, rindió protesta esta noche como gobernador de Nuevo León ante el congreso local.

Durante su intervención, Rodríguez Calderón agradeció a su familia y también a los ciudadanos que le dieron su confianza con el voto.

Recordó una frase que su padre le dijo alguna vez: “Cuando un hombre sencillo hace algo grande y sigue siendo sencillo es ya grande entre los grandes”.

El poder siempre ha sido de los ciudadanos, pero dejamos que se corrompiera, dijo quien fuera candidato independiente.

“Gracias a ustedes, hoy Nuevo León es independiente”, dijo. Al ser independientes somos más libres, y lo seremos con libertad, aseguró.

“La libertad que madres y padres trabajadores ganen salarios dignos… la libertad de hacer negocios derechos y productivos”.

Pidió paciencia para poner la casa en orden:

“Encontramos la casa sucia, las columnas derruidas, y hasta hipotecada”, esto, por el delirio de los que se creyeron reyes y no gobernantes.

Instruyó a su gabinete a presentar sus declaraciones “tres de tres”, que incluyen la patrimonial, de conflicto de intereses y fiscal.

Se les acabó la fiesta a los bandidos, advirtió. “Se acabaron los moches y las tranzas, los lujos a costa de la gente”.

Igualmente, giró instrucciones a su equipo a hacer una auditoría exhaustiva en todas las dependencias.

Si alguien cometió un crimen, dará la cara a la ley, sea quien sea, lanzó.

En tres meses tendré conocimiento del gobierno completo, y entre meses más construiremos un plan de gobierno con la participación de la ciudadanía.

Adelantó que se reunirá con los 56 mil maestros de la entidad, pues dijo, el docente será el principal aliado de la sociedad, al tiempo que prometió mejorar sus condiciones laborales.

Al evento, en representación del presidente Enrique Peña Nieto, asisitó el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

ml

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