Estrellas de la red sufren también

janet.merida@eluiniversal.com.mx

Las nuevas estrellas de Internet también han enfrentado el problema de haber sido víctimas de fanáticos.

Youtubers como Hola soy Germán compartió hace tiempo su preocupación porque comenzó a recibir amenazas de muerte de alguien con datos muy precisos sobre él y su familia, nunca se supo públicamente si la persona detrás de esto era un fanático.

El mexicano Mario Bautista alguna vez compartió a este medio que una ocasión, en medio un grupo de fans que le pedía autógrafos y fotos, una niña gritó “¡quiero su pelo!”

Varias le siguieron con un “¡yo también!”, lo hicieron sangrar al arrancarle parte de su cabellera.

“Hay gente que se llega a identificar de tal manera con el actor que es casi como querer inmolarse con él, como querer ser parte de él, o si en algún momento hace algo con lo que no está de acuerdo es como si lo castigara él mismo, eso no entra dentro de un comportamiento normal, y menos cuando ya se trata de un asesinato, cuando hay este tipo de situaciones siempre hay una explicación psicológica del motivo por el cual alguien agrede a otra persona pero una cosa es la explicación y otra cosa es la justificación” agrega la psicóloga Gloria Noriega.

Falta de atención. El caso de Vitalii Sediuk se ha vuelto representativo de los ataques a celebridades, ya que lo ha hecho varias veces, incluyendo a la modelo Gigi Hadid, a quien abrazó y cargó a la fuerza.

Pese a que muchos artistas cuentan con un fuerte dispositivo de seguridad, la situación ocurrida a Gigi Hadid demuestra que no siempre se puede evitar una acción como la de Vitalii, que más allá de ser una “protesta” se convierte en una especie de agresión a otro ser humano.

Cuando Adele recibió su Grammy Sediuk apareció en el escenario diciendo lo mucho que la admiraba.

¿Fanatismo o robar foco? el “reportero” ucraniano se ha justificado diciendo que son formas de protestas, sin embargo, también podría considerarse como una falta de respeto

“Él está provocando esta situación, un rechazo, ser castigado, ser golpeado, todos estos comportamientos en cualquier persona tienen una historia que puede venir desde su niñez, desde su familia, desde diferentes cosas, cada situación, cada caso es particular y debería analizarse de manera individual. Sí hay una gran necesidad de llamar la atención a costa inclusive de generar un rechazo social o de ser inclusive golpeado o hasta encarcelado” señaló la psicóloga.