Más Información
Reforma de igualdad sustantiva avanza en San Lázaro; contará con fiscalías especializadas en violencia de género
“No fue contabilizado”; voto fantasma de Pedro Haces es culpa del proveedor de Internet: Sergio Gutiérrez Luna
Tribunal Electoral rechaza opinar sobre acción de la SCJN contra reforma judicial; señala falta de competencia
VIDEO Norma Piña destaca el valor del Poder Judicial ante calumnias y agresiones; “han redoblado esfuerzos con integridad”
Read in English
La inseguridad se acentuó en el sexenio que termina permeando prácticamente en todos los ámbitos de la vida pública, aunque en algunos estados la situación fue más evidente que en otros.
Por la inseguridad, en varias ciudades las escuelas impartieron cursos para saber cómo actuar si algún tiroteo se producía cerca del plantel, la vida social se modificó es preferible resguardarse en casa que exponerse en la vía pública; por la inseguridad, en definitiva los niños no salen a la calle a jugar.
Las empresas tampoco se salvaron. Los índices delictivos los golpearon de diferentes formas. El Inegi informó hace unas semanas que el costo promedio de los delitos cometidos contra empresas en 2017 fue de 66 mil 31 pesos. El costo de la inseguridad se ha convertido en un virtual impuesto adicional para las empresas en México.
Ahora la Cámara Americana de Comercio, que aglutina a 1,450 compañías que tienen presencia tanto en México como en Estados Unidos, señala que una encuesta realizada entre 415 de sus ejecutivos arroja que la cuarta parte de ellos considera que la situación de su empresa empeoró como consecuencia de la inseguridad. Sólo 18.6% ve una mejoría, pero 83.7% lo atribuye a las acciones adoptadas de manera interna.
De las empresas consultadas, 6% suspendió de manera total sus proyectos de inversión y 14% cesó operaciones, principalmente en Tamaulipas, Guerrero y Michoacán. Para los integrantes de la Cámara, “la actuación de la autoridad es deficiente en la mayoría de los casos, sobre todo a nivel estatal y municipal”.
Las respuestas de los integrantes de la Amcham no sorprenden. Diversos organismos empresariales han registrado previamente el ambiente poco favorable para desarrollar negocios en algunas entidades.
Lo que sorprende es que el sexenio haya transcurrido con índices delictivos en ascenso sin que se dieran cambios en la manera de enfrentar el problema.
En lugar de ello, la modernización de las policías quedó pendiente, la Policía Federal aumentó de manera mínima el número de efectivos y la prevención del delito se consideró poco importante por lo que ya no recibió recursos.
En el documento que presentó la Amcham propone incluso cinco puntos para mejorar el ambiente de seguridad, sin embargo, por lo que se vio en el sexenio que está por concluir, en el combate a los grupos criminales se requiere algo más que tener líneas de acción, se necesita voluntad.