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El Dragon Mart Cancún enfrenta sus últimas batallas ante las autoridades mexicanas.

Hasta la fecha, la empresa Real Estate Dragon Mart Cancún mantiene una pelea en el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa (TFJFA) para anular las multas y sanciones interpuestas por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y además tiene la posibilidad de ampararse ante el Poder Judicial.

El litigio en el Tribunal Federal puede tomar todo el año y, en caso de que la empresa aprovechara el juicio de amparo directo, puede prolongar el proceso cinco o seis meses, por lo que el punto final para el centro de negocios es a mediados o finales de 2017, según estimaciones de la Profepa.

“Ahora estamos en la etapa de sustanciar las pruebas periciales, peritos forestales han acudido en varias ocasiones al predio para hacer diligencias y demostrarle al tribunal que éste (El Tucán) es un predio forestal y requería un permiso federal, por lo tanto la remoción de vegetación constituye un daño en términos de la legislación vigente”, informó Gabriel Calvillo, subprocurador jurídico de Profepa.

En entrevista con EL UNIVERSAL, comentó que Dragon Mart“ jamás prosperará”, aunque la empresa mantenga la pretensión de continuar con la construcción del centro comercial.

Se esfuma el dragón. Las oficinas de Dragon Mart en el edificio Centro Corporativo Cancún no registra el mayor movimiento, los teléfonos de la empresa fueron suspendidos, al igual que el celular de su director general, Juan Carlos López, quien tampoco contesta correos electrónicos.

En este momento, la página web de la empresa fue dada de baja y su dominio es subastado. El predio “El Tucán”, ubicado en la carretera federal Chetumal-Cancún, sigue clausurado y no hay actividad en la zona.

Activistas de agrupaciones ambientalistas como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), Voces Unidas de Puerto Morelos y Ombligo Verde dijeron no tener información sobre movimientos recientes de Dragon Mart e incluso algunos dan por hecho el fin del proyecto.

“Hasta donde tenemos conocimientos se ampararon contra las multas de Profepa pero desconocemos si pagaron o no. Estamos dando seguimiento a las actuaciones de Profepa, pues el objetivo final es que se aplique la ley”, comentó Alejandra Serrano, directora de la oficina sureste de Cemda.

Una de las barreras de las asociaciones civiles para seguir informados sobre el Dragon Mart ha sido los requerimientos de tiempo, dinero y esfuerzo necesarios para estar organizados, dijo Guadalupe Velázquez, miembro de Voces Unidas de Puerto Morelos.

Para Tulio Arroyo, miembro de Ombligo Verde, el Dragon Mart desapareció en el horizonte, luego de que el proyecto fue detenido en su totalidad por las autoridades ambientalistas.

Riesgo latente. El riesgo del Dragon Mart Cancún sigue latente, asegura la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), uno de los principales detractores del centro.

“Hasta no ver que ese proyecto se ha cancelado por todos los medios, siempre estará latente su construcción”, afirmó en entrevista Juan Manuel González Chaparro, presidente de Fomento Industrial de la Canacintra.

La industria, agregó, siempre está alerta para intervenir, protestar y hacer lo necesario para que estos productos no dañen a empresarios y reduzcan la oportunidad de empleos en México.

El tema de Dragon Mart tiene una dimensión más grande y de mayor impacto en la economía mexicana, consideró el Centro de Estudios China-México (Cechimex) de la UNAM.

“Es una gran lástima que el proyecto no se hubiera dimensionado como una relación estratégica entre México y China, la cual es necesaria para ambos países. Desde 2013, los mandatarios de estos dos países se han visto y se han comprometido a aumentar las inversiones”, recordó Enrique Dussel, investigador y coordinador de Cechimex.

“China está invirtiendo masivamente en el mundo en Europa, Asia, Estados Unidos, América Latina, pero no en México, el problema parece que no es China sino México, hay una falta de comprensión de empresas e inversionistas chinos”, expuso.

Dejó garantía. El Dragon Mart Cancún tiene una multa por pagar de 7 millones 233 mil pesos y dos obligaciones de compensación que superan los 2 millones de pesos, aclara Profepa, aunque tiene otras sanciones y procesos como una denuncia penal ante la Procuraduría General de la República.

El grupo Real Estate Dragon Mart Cancún dejó garantías financieras para hacer frente a las sanciones económicas, por lo que las autoridades tienen la capacidad de ejecutar estos recursos en caso de una resolución contra la empresa, explicó Gabriel Calvillo, subprocurador jurídico de Profepa.

La lección de Dragon Mart es comparada con el caso Tajamar, donde la capacidad de empresas por dañar ecosistemas es un reto para Profepa.

“En los casos donde haya irregularidad van a ser aplicadas las sanciones y donde haya resistencia solicitaremos al Ministerio Público”, agregó.

Con información de Adriana Varillas.

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