Exportaciones de autos sufren por preferencia de camionetas en EU

sara.cantera@eluniversal.com.mx

La gasolina barata en Estados Unidos (EU) incentiva la compra de camionetas SUV y crossovers, situación que ha afectado la exportación mexicana de autos con alto volumen de producción en el país como el Fusion, Sentra y Versa.

En el primer semestre del presente año, las exportaciones de Sentra, Fusion y Versa disminuyeron 5.1%, 45.8% y 5.3%, respectivamente, mientras que los envíos de las camionetas Silverado 2500, Ram 2500, GMC Sierra y Journey aumentaron 1.1%, 2.2%, 8.5% y 80.3%, respectivamente, en el mismo periodo.

En total, las exportaciones de autos hacia EU y Canadá crecieron 10% en los primeros seis meses del año, pero los envíos de camionetas se incrementaron 17.2%, de acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

Guido Vildozo, analista para Latinoamérica de IHS Markit, comentó que los vehículos que se fabrican en México como Fiesta, Fit, Accent, Río, Versa y Yaris corren el mayor riesgo de disminuir sus exportaciones a EU por este cambio en la tendencia de consumo de ese país.

“México está muy expuesto al tema de autos. En su momento tenía sentido enfocarse al segmento de autos cuando el precio de la gasolina rondaba los cuatro dólares por galón, pero en la realidad actual el consumidor estadounidense quiere SUV”, dijo.

Sin embargo, IHS Markit no prevé una caída en la producción automotriz en el país, porque hay nuevas plantas como las de KIA y Audi que arrastran la cifra total de producción hacia arriba.

El Forte que se fabrica en la planta de KIA es el quinto auto más exportado desde México, con un crecimiento de 566% en el primer semestre.

Y, a pesar de ser un auto compacto, en Estados Unidos las ventas del Forte se incrementaron 11.4% en el primer semestre del año, al comercializar 58 mil 746 unidades.

Sólo el Forte y el Cruze, ambos hechos en México, incrementaron sus ventas en el mercado estadounidense en el primer semestre, mientras que el Sentra disminuyó 8.5% sus ventas, el Fusion, 27%, y el Jetta, 4.8%.

Miguel León Garza, profesor del IPADE, coincidió en que este cambio en la tendencia de consumo de los estadounidenses no afectará la producción automotriz en México porque las armadoras tienen un proceso de fabricación muy flexible.

“El mercado es el que manda y las adaptaciones que se tienen que hacer en las líneas de producción son pequeñas. Las prensas de estampado de acero son de uso universal y lo mismo pueden hacer una salpicadera de una pick up que de un auto”, dijo.

“Fiat Chrysler en Toluca ha fabricado el Fiat 500, el PT Cruiser, la Journey y ahora el Jeep Compass, cambia con mucha facilidad. Nissan en Aguascalientes fabrica el Note, Kicks, Tiida, Versa, March y Sentra, es parte del diseño de aceros flexibles y pueden cambiar en cuanto el mercado cambia un poquito”, explicó.

Se dice que Ford dejará de producir el Fiesta en la planta de Cuautitlán, Estado de México, para fabricar una SUV, mientras que General Motors analiza la posibilidad de dejar de fabricar el Aveo para incrementar la producción de camionetas como Equinox y Terrain. Ambas firmas no han confirmado nada al respecto.

IHS Markit prevé que el precio del del barril de petróleo ronde los 70 dólares hasta 2020, por lo que el galón de gasolina estará por debajo de los tres dólares y mientras eso no cambie el consumidor estadounidense seguirá comprando camionetas en lugar de autos.