México vive momentos de debilidad institucional y de desconfianza en la justicia, lo que preocupa tanto a la sociedad como a las empresas por el impacto que esto tiene en la actividad económica del país, aseguró el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Juan Pablo Castañón.

El país “merece un nuevo sistema de justicia, eficaz y transparente, que nos devuelva la confianza en nuestras instituciones y, así, nos permita ser lo suficientemente fuertes como sociedad para afrontar los retos de este México que estamos construyendo”, dijo el líder patronal.

Ante esa situación es necesario que haya mayor coordinación entre los tres niveles de gobierno, pero especialmente en aquellos lugares donde aumentan las denuncias ciudadanas por los hechos de violencia que provoca la delincuencia organizada.

Para combatir esa situación “es indispensable que el imperio de la ley prevalezca en todos los municipios, en cada rincón, localidad por localidad, que exista una real división de poderes en todos los estados, una eficaz y oportuna rendición de cuentas, y un sistema nacional que nos permita sancionar los actos de corrupción.

Requerimos un Poder Judicial sin asomo de duda y un mejor control parlamentario”, por ello el tema de la inseguridad se abordará en el Encuentro Empresarial 2015 de la Confederación a fin de reflexionar sobre la confianza en la Justicia, comentó.

El problema es que el potencial económico que tiene México se limita por la debilidad institucional, la cual se expresa en la desconfianza de los ciudadanos hacia las leyes, su aplicación, las autoridades y hacia el sistema de impartición de justicia, comentó.

Todo lo cual se reflejó en la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública  2015 del Inegi, en la que se estima que en 2014 hubo 22.8 millones de víctimas de delitos, entre robo, fraude, extorsión, amenazas, lesiones y secuestros, entre otros.

cfe

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