La goleada de anoche sobre el América, volvió a ser una muestra de la paternidad que tiene sobre su homólogo, Miguel Herrera.

Ya son cinco partidos los que tiene el uruguayo sin perder frente al Piojo, quien tiene mucho por mejorar antes de que arranque el torneo oficial de la Liga MX.

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El 4-1 a favor del Cruz Azul reveló el dominio del charrúa, incluso cuando todavía dirigía al Santos. En la Laguna, Robert triunfó (4-1) e igualó (2-2) al medirse frente a Miguel.

Cuando tomó las riendas de La Máquina, las Águilas no han podido contra él, ni siquiera un empate. En su primer clásico joven, los cementeros golearon 5-2 a los azulcrema. Para el segundo –el último duelo del Clausura 2020– superó por la mínima, gracias al penalti atajado por José de Jesús Corona en el suspiro final en el Estadio Azteca.

La cereza en el pastel fue el duelo de anoche en el Olímpico Universitario, en el cual el uruguayo subrayó su paternidad sobre Miguel Herrera.

 

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