A unas semanas del asesinato del revolucionario Pancho Villa, en Parral, Jesús Salas Barraza, diputado de la legislatura de Durango, hizo públicas unas cartas donde confesaba haber sido el autor intelectual del magnicidio, con ello pretendía terminar con teorías y especulaciones. Texto: Montserrat Callejas