La extraordinaria rivalidad que se ha venido creando entre Carlitos Alcaraz y Jannik Sinner está conmocionando a los aficionados al tenis en todo el mundo.
La juventud de Carlitos —de 20 años de edad— y de Jannik —de 22—, la forma en la que están jugando, su comportamiento dentro y fuera de la cancha, así como su disciplina, hace que los cuatro torneos de Grand Slam en 2024 y los Juegos Olímpicos en París, creen mayor expectativa, con competitividad absoluta, incluso con la presencia de Novak Djokovic y Daniil Medvedev.
Alcaraz es técnica y físicamente mejor que Jannik, pero Sinner lo aventaja en el aspecto mental.
El italiano ha madurado en los últimos meses, llevando dos años ya entre los mejores del mundo. Su triunfo en Australia así lo demuestra.
Carlitos —por su lado— perdió en cuartos de final y uno que otro Top 5 del mundo le está encontrando su vulnerabilidad, la manera de jugarle y hasta de ganarle.
Alcaraz ya tiene dos campeonatos en torneos de Grand Slams, a su corta edad, y Sinner ya ganó su primero hace unos días.
Alcaraz tiene gran espectacularidad, con la que ejecuta sus golpes, además de la forma de hacer contacto con el público, envolviéndolo en la emoción del momento.
La simpatía y arrojo que tiene, arriesgando más de la cuenta, es una situación que lo está haciendo perder partidos.
El talento del español es inmenso, pero todo lo señalado lo hace jugar al filo de la navaja.
Sinner —por su parte— es muy eficiente, destacando su potencia, así como la colocación milimétrica en sus golpes de fondo.
Al italiano no le gusta ir a la red, y su servicio es letal.
Sinner y su fuerza mental es singular. Alcaraz cuenta con su talento natural.
Ambos tienen un excelente staff de entrenadores y administradores, siendo la gran rivalidad del momento.
Esta rivalidad promete grandes momentos para el aficionado. Carlitos y Jannik se lo han ganado todo a conciencia.
