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Ciudad de Panamá.— En su viaje hacia Estados Unidos, cerca de 19 mil niños han cruzado a pie este año la peligrosa selva del Darién, en la frontera panameña con Colombia, un máximo histórico que refleja una “creciente afluencia que debería ser tratada urgentemente como una grave crisis humanitaria por toda la región, más allá de Panamá”, dio a conocer UNICEF.
La cifra es “casi de tres veces más que la registrada durante los cinco años anteriores juntos”, alertó el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
“Nunca antes nuestros equipos sobre el terreno habían visto a tantos niños pequeños cruzando el Darién, a menudo sin compañía”, aseveró la directora de UNICEF para América Latina y el Caribe, Jean Gough.
El organismo internacional aseguró que más de uno de cada cinco migrantes que cruzan la frontera entre Colombia y Panamá son niños. La mitad de ellos tiene menos de cinco años.
El Darién es una de las rutas migratorias más peligrosas del mundo: hay animales salvajes y grupos criminales.
Desde hace años la atraviesan migrantes provenientes de todo el mundo que viajan rumbo al norte de América, concretamente a México y Estados Unidos, con picos de tránsito entre 2015 y 2016 de viajeros cubanos, y actualmente con la movilización de decenas de miles de haitianos.
Con base en el registro actualizado a octubre del Sistema Nacional de Migración de Panamá, más de 91 mil migrantes han atravesado la selva durante 2021, número equivalente al total de los cinco años anteriores.
La mayoría son haitianos (56 mil 600), muchos de ellos acompañados por menores; seguidos de cubanos (12 mil 800), venezolanos (mil 500), además de los continentes asiático y africano, entre ellos Bangladesh, Senegal, Ghana, Uzbekistán, India y Nepal, dijo la OIM.
“Cada niño que cruza el Darién a pie es un sobreviviente”, afirmó Gough, al detallar que “en lo profundo de la jungla, el robo, la violación y la trata de personas son tan peligrosos como los animales salvajes, los insectos y la absoluta falta de agua potable.
“Semana tras semana más niños mueren, pierden a sus padres o se separan de sus parientes durante este peligroso viaje. Es espantoso que los grupos criminales se aprovechen de estos niños cuando son los más vulnerables”, lamentó la alta funcionaria.
De acuerdo con datos de UNICEF, este 2021 al menos cinco niños fueron encontrados muertos en la selva. Desde principios de año, más de 150 niños llegaron a Panamá sin sus padres, algunos de ellos son bebés recién nacidos, un incremento de casi 20 veces en comparación con 2020.
Entre enero y septiembre pasados, UNICEF registró 29 denuncias de abuso sexual de niñas y adolescentes durante el viaje y muchas más mujeres han denunciado agresiones de este tipo. “Hay informes alarmantes sobre el aumento del número de acosos sexuales a niñas, a veces muy jóvenes, de hasta 11 años”, dijo Laurent Duvillier, jefe regional de comunicación de UNICEF.
Prevén alza sostenida
El organismo señaló que se prevé que el número de niños y familias migrantes que cruzan la selva siga aumentando en las próximas semanas y meses, ante lo cual “está ampliando su respuesta humanitaria para abordar las necesidades urgentes” de esa población.
“UNICEF insta a los gobiernos a garantizar la protección de los niños en movimiento a lo largo de su viaje y a coordinar la implementación de una respuesta humanitaria más sólida en todos los países involucrados”.
Se debe, agregó el fondo, “promover la integración de las familias migrantes en las comunidades de acogida y se deben abordar las causas fundamentales que las llevan a migrar. Esta es una crisis de magnitud regional que requiere una respuesta humanitaria coordinada”, concluyó Duvillier.