Al menos 190 animales fueron asegurados en el santuario Black Jaguar-White Tiger, ubicado en la alcaldía Tlalpan, que también quedo bajo resguardo, donde hubo denuncias por maltrato y malas condiciones para el resguardo de leones africanos y blancos, tigres, jaguares y pumas, monos arañas y hasta burros.
Tras el operativo, el abogado de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (Azcarm), Cristopher Estupiñan, pidió a las autoridades capitalinas y federales una inspección mayor, pues se tiene conocimiento de fosas clandestinas de animales en el interior.
Lo anterior fue asentado en la denuncia interpuesta en la Fiscalía General de la República (FGR) y en la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), luego que uno de los extrabajadores del lugar narrara las condiciones en las que se encontraban los felinos.
En la denuncia, de la cual se tiene copia, se pueden observar imágenes de tigres y leones desnutridos, algunos con heridas expuestas en distintas partes del cuerpo, en jaulas pequeñas.
También se refiere que Black Jaguar-White Tiger no cuenta con los permisos y su propietario identificado como Eduardo Mauricio ha pedido donaciones a través de videos para el supuesto mantenimiento del lugar, sin que ello se vea reflejado.
A pesar de que las denuncias interpuestas por el litigante fueron de orden federal, agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina se encargaron de asegurar el lugar por uso indebido de suelo.
En el predio ubicado en la calle Carretonco, en la colonia San Miguel Ajusco, se colocaron sellos de aseguramiento por violaciones al uso de suelo y maltrato animal de fauna doméstica.
Participaron alrededor de 60 efectivos de la SSC que brindaron seguridad perimetral, realizaron patrullajes preventivos y de reconocimiento en las inmediaciones del sitio, donde se llevaron a cabo las diligencias ministeriales.
Aunque la Profepa señaló que se recuperaron 190 felinos, la Secretaría de Seguridad Ciudadana reportó que fueron 177, además de 17 monos, cuatro perros, dos coyotes y dos asnos que fueron hallados en el sitio, de los cuales se instruyó al personal de la Brigada de Vigilancia Animal resguardar a los canes y burros que se hallaban en condiciones de maltrato.
Será la Profepa la instancia que, después de los estudios y análisis pertinentes, determine el destino y las condiciones de traslado y resguardo de la fauna silvestre y exótica localizada en el predio.
En tanto, la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México señaló que se encargará del rescate, contención, traslado, manejo, rehabilitación y resguardo de los felinos.
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, informó que los ejemplares recuperados serán recibidos en zoológicos.
“Hubo un aseguramiento de la fiscalía, los animales están bajo revisión, se van a llevar a los zoológicos, normalmente ocurre así, la Profepa primero toma en sus manos a los animales y después ubica un lugar, donde puedan reponerse y recuperarse”, indicó.
La mandataria capitalina aseveró que veterinarios revisan el estado de salud de los felinos, a la vez que precisó que la Dirección General de Zoológicos analiza cuál lugar sería el espacio adecuado para llevar a los animales silvestres.
Indicó que el director General de Zoológicos se encuentra revisando la situación para encontrar el mejor lugar para que los animales se repongan.
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