"Queremos autonomía": comunidad del CIDE

Los maestros y estudiantes del Centro de Investigación y Docencia Económicas ( CIDE ) indicaron que el encuentro con alrededor de 20 senadores de los distintos grupos parlamentarios, fue muy positivo; ahora, esperan que los legisladores funjan como intermediarios en las negociaciones con las autoridades del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología ( Conacyt ), pues desconocen a su directora, María Elena Álvarez Buylla ; y esperan que en la eventual discusión de la Ley de Ciencia , sea incorporada la autonomía del centro público de investigación.

“Los estudiantes del CIDE han sido plantados, hemos pedido la intermediación de la secretaría de Gobernación y Educación, del gobierno de la Ciudad de México, del gobierno federal. Nadie nos había recibido, por eso queremos agradecer que los legisladores sí nos hayan recibido”, dijo el investigador y profesor del CIDE, Javier Aparicio.

El catedrático indicó que se hicieron dos peticiones formales: legislar para dar “autonomía plena al Centro de Investigación y Docencia Económicas”. “Creemos que para el ejercicio de una educación libre es fundamental contar con autonomía para que no nos estén diciendo que sólo las universidades autónomas pueden ejercer su libertad de cátedra o su libertad de expresión, para que no nos digan que somos burócratas, que somos una paraestatal y no nos queda de otra más que esperar a que la directora del Conacyt decida quién quiere que nos dirija, estamos en contra de eso. No creemos que nuestras libertades y derechos estén supeditados a qué partida presupuestal o qué ley secundaria es la que nos da cobijo. Esa es nuestra primera petición: queremos autonomía. Es posible que a otros centros públicos de investigación les interese esto, ya lo veremos”, dijo Aparicio.

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Asimismo, indicó que a nombre la comunidad cideíta se insistió en que otra de las exigencias es la destitución de José Antonio Romero Tellaeche porque no sólo le ha “faltado al respeto a la comunicad”, sino también porque designado sin someterse a consideración del Consejo Directivo del CIDE, máxima figura del centro”.

“No sólo es repudiado por la gran mayoría de la comunidad del CIDE. El doctor Romero ha logrado un consenso generalizado entre trabajadores, estudiantes y maestros en su contra y esto lo sabe el Conacyt desde hace semanas, antes de que fuera designado. Conacyt no nos escuchó y decidió imponer a un director”, añadió Aparicio.

Por la tarde, los integrantes de la Asamblea del CIDE publicaron un comunicado para advertir que dicha autonomía legal deberá estar bajo el modelo de El Colegio de México “con el objetivo de garantizar que se preserve la calidad académica que caracteriza al CIDE, libre de toda intervención política, de modo que nuestra institución tenga las condiciones para seguir brindando beneficios a la educación pública y para la generación de conocimiento en nuestro país”.

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Asimismo, precisaron que pidieron a los senadores que les ayuden a gestionar que la Secretaría de Gobernación sea mediadora para establecer un espacio de diálogo real entre la comunidad del CIDE y Conacyt.

“La resolución de la crisis institucional actual requiere que haya negociación de buena fe que dé cauce a las demandas de la Asamblea Académica Permanente, del Movimiento Estudiantil y de los sindicatos, con el fin de restablecer la legalidad en los procesos de toma de decisión en el CIDE. El diálogo directo con Conacyt ha sido imposible hasta ahora, porque su titular no muestra apertura al diálogo. Además, la Dra. Álvarez-Buylla ha perdido la confianza de la comunidad: reiteradamente falta a la verdad en sus comunicados y desprestigia públicamente el movimiento de la comunidad estudiantil y los motivos de los académicos y otros trabajadores del Centro”, se lee en el documento.

fjb