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El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reiteró que la restauración de los inmuebles dañados por los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017 en 11 estados del país (Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Puebla, Estado de México, Morelos, Guerrero, Tlaxcala, Hidalgo, Veracruz y Ciudad de México) será financiada con recursos del Fondo Nacional de Desastres (Fonden), el Gobierno Federal a través del Programa Nacional de Reconstrucción, y Seguros Banorte.

“Las Declaratorias de Emergencia para cada estado permitieron que el Patrimonio Cultural Edificado tuviera recursos disponibles del Fonden para mil 252 acciones por cinco mil millones 775 mil 690 pesos para su restauración. Este recurso se encuentra garantizado, en virtud de que su origen no es presupuestal y se encuentra disponible para su aplicación”, informó el INAH en una tarjeta informativa luego de que EL UNIVERSAL publicara el texto “A 18 meses del 19-S, esperan dinero de seguro y Fonden”, el 22 de marzo.

En el caso de Seguros Banorte, de acuerdo con el INAH, la compañía “indemnizará toda pérdida o daño que hayan sufrido los bienes muebles e inmuebles que están bajo el cuidado del Instituto. La responsabilidad máxima se establece en 3 mil 500 millones de pesos por evento y, para los sismos de septiembre de 2017, se consideran dos eventos: el ocurrido el 7 y el 19 del mismo mes”.

El Gobierno Federal destinó 800 millones para cubrir “daños en aquellos inmuebles y muebles históricos que no cuentan con recursos para su restauración”.

El INAH señaló que emprendieron un Plan Maestro y un Programa de Restauración para atender a los 2 mil 340 inmuebles y 13 mil 385 bienes muebles dañados por los sismos, de los cuales, hasta el 15 de febrero, se habían concluido “cerca de 659 templos, 193 bienes asociados a ellos y 20 zonas arqueológicas, con un total global de 872 bienes restaurados”.

Con respecto al Palacio Municipal de Juchitán (Oaxaca), el Instituto indicó que para evitar que continuara su deterioro, fueron utilizados recursos del Programa de Acciones Preliminares Inmediatas (APIN), y que en el inmueble se han realizado estudios de mecánica de suelos, calas estructurales y sondeos arqueológicos que permitan desarrollar un proyecto estructural que garantice su estabilidad. Añadió que cuentan con “recursos suficientes para iniciar trabajos preliminares en breve, y una primera fase de la restauración que llegará hasta finales del 2019.

Los palacios municipales de Tlayacapan y Jojutla, ambos en Morelos, informó el INAH, tienen daños severos. En el de Tlayacapan, ya fue reforzado de forma estructural, en el lugar han realizado levantamientos topográficos y de verticalidad, y se realizan trabajos de consolidación en bóvedas de entrepiso primer nivel, y consolidación en muros de primer nivel, en el lado poniente, entre otras obras. El proyecto de restauración del Palacio Municipal de Jojutla está desde enero.

Sin embargo, en ambos casos el Instituto no especifica cuándo estaría terminada la restauración como sí lo hizo con el caso de Oaxaca. Sí indica que los tres inmuebles serán restaurados con recursos del Plan Nacional de Reconstrucción. “Se encuentra próxima la publicación de los lineamientos para el uso de esos recursos y poder iniciar la restauración de los inmuebles”.

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