Cuba contra su brecha digital

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Del martes 25 al jueves 27 de junio, el Palacio de las Convenciones, en la Habana, Cuba, fue sede del primer Foro Nacional de Gobernanza en Internet, acto organizado por la Unión de Informáticos de Cuba.

La conferencia inaugural estuvo a cargo de Juan Fernández González, asesor del Ministerio de Comunicaciones de la República de Cuba, y la primera jornada contó con la asistencia de Jorge Luis Perdomo Di-Lella, ministro de Comunicaciones en Cuba; Anayansi Rodríguez, vicemininistra de Relaciones Exteriores; además de distinguidos miembros de la alta burocracia del gobierno cubano.

Esta iniciativa forma parte de las acciones gubernamentales para impulsar el programa de informatización de la sociedad. El lema del Foro fue “Justicia social y desarrollo humano sostenible”.

Entre los temas que fueron abordados destacaron tendencias en la comunicación política digital, gobierno electrónico para el desarrollo local y ciberseguridad.

La jornada de clausura incluyó el “Foro Social Internet de la Confianza”, así como el panel “Por una cultura de la ciberseguridad”. Además, en el acto fue dada a conocer la declaración final del primer Foro Nacional de Gobernanza en Internet.

La penetración de internet en Cuba es una de las más bajas en el Caribe. En 2016, de acuerdo con la Internet World Stats (IWS), la penetración fue estimada en 33%. De cada 10 habitantes en la isla, solo tres tenían acceso a internet. Entonces, el promedio de la penetración de internet en el Caribe fue estimado en 43.7%.

En años recientes, el gobierno reparó en lo delicado de su brecha digital y decidió impulsar el desarrollo de internet y la infraestructura de telecomunicaciones dejando atrás los discursos que calificaban a internet como “una de las peores perversidades del imperialismo”.

Tal viraje conceptual resultó sumamente desconcertante para no pocos voceros y periodistas del régimen, quienes estaban acostumbrados a desconfiar de las posibles bondades de las nuevas tecnologías. Entre no pocos de los participantes del foro prevaleció cierta nostalgia por mantenerse instalados en un pasado permanente.

Abundaron furiosas arremetidas contra las noticias falsas y al perverso “algoritarismo” que ejercen firmas como Google y Facebook, los nuevos ejes del mal. Atrás quedaron los cuestionamientos a Coca Cola como comercializador de las “aguas negras del imperialismo”.

La celebración del foro se antoja tardía, tanto como las primeras conexiones a internet, realizadas en 1996 a 64 kbit/s; el que hasta 2007 fue “legalizada” la compra de computadoras; y en 2014 la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), perteneciente del Estado, comenzó a habilitar algunas zonas de acceso público a internet. Cuba tiene mil 353 dominios registrados (.cu) y 2 mil 500 sitios web, de ellos 135 son de medios informativos.

Los temas abordados en el Foro no fueron precisamente de actualidad. Entre las grandes omisiones, por ejemplo, estuvieron: ciudades y ciudadanos inteligentes, el desarrollo de la inteligencia artificial (IA), Internet de las cosas (IoT), 5G, Big Data. El papel de las tecnologías de frontera en el cumplimiento de lo estipulado en las metas establecidas por Naciones Unidas en materia de desarrollo sostenible ni siquiera fue objeto de mención.

La alta burocracia cubana sigue desconfiando de internet, pero parece dispuesta a incorporarlo como útil herramienta en el desarrollo de las políticas públicas. Quizá en una siguiente edición del foro se repare en la importancia de estimular la efectiva participación de la sociedad civil, una gran asignatura pendiente.