El organizador de la fiesta de la Selección

Al igual que su padre, Pablo Roberto Sandoval López aprovechó el poder y el dinero para tejer amistades con figuras públicas. El hijo del ex gobernador de Nayarit se da la gran vida: usa ropa de diseñador, viaja en aviones privados, departe con famosos en playas exóticas y organiza fiestas de ensueño.

Una de esas fiestas habría causado el escándalo de la Selección Mexicana de futbol previo a su viaje a Rusia. Se trata de la reunión que dio a conocer el 5 de junio una revista de espectáculos, junto con una serie de fotos del festejo, en una residencia de Las Lomas de Chapultepec, en la Ciudad de México, misma que habría durado más de 24 horas y en la que supuestamente participaron alrededor de 30 “escorts VIP”.

La revelación del suceso generó diversas reacciones, desde presuntos problemas maritales del futbolista que milita en el Porto de Portugal, Héctor Miguel Herrera, hasta un video de Javier El Chicharito Hernández en el que atribuyó la fiesta a su celebración de cumpleaños.

No obstante, poco o nada se ha hablado sobre quien, según fuentes de primer nivel, fue el organizador y patrocinador de esa fiesta: Pablo Roberto Sandoval López, hijo del ex gobernador de Nayarit Roberto Sandoval Castañeda durante el periodo 2011-2017.

Sandoval López es un futbolista con carrera trunca, cuyo mayor logro en las canchas fue obtener, en 2012, el campeonato en la Liguilla de Nuevos Talentos de la Segunda División con los Estudiantes Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara, propiedad de Antonio Leaño Reyes.

Es un futbolista con registro vigente ante la Federación Mexicana de Futbol (FMF) y la Liga MX, pero a quien se le vio por última vez en las canchas en 2013, cuando asistió a las pruebas del equipo de Segunda División de las Chivas Rayadas del Guadalajara, del empresario Jorge Vergara.

Lo que más llamaba la atención de Pablo Sandoval, empero, no era su talento en la cancha, sino que acudía a las pruebas con un equipo de cinco elementos de seguridad y con vehículos blindados pertenecientes al Gobierno del estado de Nayarit.

A sus 26 años de edad, Pablo es famoso entre su círculo de amistades por sus excesos y lujos, así como por presumir una muy cercana amistad con varios de los futbolistas que hoy en día defienden la camiseta mexicana en el Mundial de Rusia 2018.

En su página de Facebook, Pablo Roberto exhibe fotos con jugadores como los hermanos Giovani y Jonathan Dos Santos, Andrés Guardado, Carlos Vela, Raúl Jiménez y Diego Reyes. Unas de las imágenes tiene como locación la paradisiaca isla de Ibiza, España, por la boda, en julio de 2017, del arquero mexicano Paco Memo Ochoa.

El hijo del ex mandatario nayarita, dijeron las fuentes, es el encargado de organizar fiestas con futbolistas y figuras públicas en diversos centros turísticos, entre ellos la Riviera Nayarita.

Hasta esos destinos se desplaza en jets privados y yates al servicio de la familia del ex gobernador. Los invitados departen en lujosos restaurantes y hoteles en compañía de las amigas de Sandoval López, quienes también se observan en imágenes de su cuenta personal.

Pablo Roberto es también amigo de otros deportistas como Saúl El Canelo Álvarez, de acuerdo con las propias imágenes que gusta presumir, y de artistas como el actor Diego Boneta, protagonista de la serie del cantante Luis Miguel en la plataforma de Netflix.

El hijo de Sandoval Castañeda ha decidido seguir al pie de la letra los pasos de su padre, un gobernador que se llenó de señalamientos por los evidentes derroches durante su sexenio.

Tan sólo en los últimos meses, la Fiscalía General de Nayarit ha asegurado cinco propiedades a la familia como parte de las investigaciones de la carpeta NAY/TEP-III/CI0031/2018, además de que se han detectado excentricidades como una silla de montar fabricada en oro de 24 quilates con incrustaciones de diamantes y con las iniciales RSC.

Paraísos fiscales, lavado y futbol. En la columna anterior dimos cuenta de la incómoda y riesgosa situación del futbolista Rafael Márquez en el Mundial de Rusia 2018 debido a las investigaciones en su contra por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos por presunto lavado de dinero.

Este problema no es nuevo para el futbol nacional, pero preocupa que pese a que cada vez hay más casos ni la Federación Mexicana de Futbol ni los equipos se han preocupado por atacarlo. En México están los del empresario Carlos Ahumada con el León y el Santos Laguna y más recientemente el fichaje de Jesús El Tecatito Corona a Europa gracias a un promotor deportivo ligado al Cartel de Juárez, Matías Bunge, quien también apareció en los Paradise Papers.

En marzo de 2016, el sitio Football Leaks filtró documentos que comprobaban que los traspasos del Tecatito Corona al Twente de Holanda y de Diego Reyes al Porto de Portugal se habían realizado a través de la empresa Grupo Cónclave, de la cual Bunge fungía como representante.

Frente a estos casos resulta increíble que, a la fecha, ni la FMF ni las autoridades hayan implementado protocolos para prevenir que los equipos sean usados con fines ilícitos.

En Colombia, desde 2013 la Superintendencia de Sociedades vigila a los equipos por ser empresas y los obliga a adoptar el Sistema Integral de Prevención de Lavado de Activos y Financiación del Terrorismo. En España también existen los Estatutos de La Liga de Futbol Profesional.

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