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Este 2017 fuimos testigos de la guerra por adquirir los derechos de transmisión, por televisión, de la Selección Nacional. Al final fue Televisa el ganador y tendrá estos derechos por un buen rato. Por su parte, Claro Sports ganó la partida por los derechos de Juegos Olímpicos y así se están repartiendo el botín, aunque la joya de la corona siempre será el futbol.
FIFA es totalmente consciente de esta situación y su mayor arma son precisamente los derechos de transmisión de la Copa del Mundo, siendo éste un negocio redondo.
Si nos remontamos al Mundial de Brasil 2014, este torneo generó cuatro mil millones de dólares en ingresos totales para la FIFA, un 66% más que Sudáfrica 2010.
La ganancia de la FIFA por el Mundial que está por realizarse estará rondando en los tres mil 500 millones de dólares, y por derechos de transmisión en televisión aproximadamente dos mil 800 millones de dólares. El resto de los ingresos estarán repartidos entre los socios comerciales y/o patrocinadores.
Investigaciones de mercado indican que aproximadamente 900 millones de personas encendieron su televisión para ver el Mundial, al menos un minuto, y unos 500 millones se detuvieron frente al televisor 25 minutos para observar los partidos. Las estadísticas indican que, en los últimos dos Mundiales, el promedio aproximado de audiencia en cada partido es de 180 millones de personas.
Para Rusia, la expectativa es de 230 millones de personas viendo cada partido.
Sin duda, las ganancias o los ingresos se leen espectaculares, pero también es una realidad que la FIFA debe gastar en la operación del torneo y créanme que no es nada barata, ya que las federaciones participantes reciben aproximadamente 650 millones de dólares. Tenemos que sumar los premios de 90 millones de dólares. Si se analizan los números, aproximadamente cada jugador le cuesta a la FIFA 85 mil dólares por el torneo.
El éxito económico que tiene la Copa del Mundo es, sin duda, un factor muy importante para el crecimiento del deporte mundial, impulsando —sin duda alguna— al del país sede, en cuanto a infraestructura y capacidad monetaria. El organismo que rige al futbol en el planeta Tierra destinará para el próximo año cuatro mil 300 millones de dólares, los cuales servirán para proyectos de desarrollo de cada una de las federaciones.
Conforme avanzan los días y el Mundial se acerca, la economía del futbol seguirá creciendo, los países calificados estarán generando una economía local importante con los patrocinadores de cada una de las selecciones y no se diga de los patrocinadores globales, los cuales tendrán la oportunidad invaluable de comunicar, vender y posicionar aún más sus marcas. En México, aunque tendremos un semestre bastante especial, teniendo elecciones a mitad de año, el futbol se llevará la mayor atención y —sin duda— las mayores ganancias.
@husseinforzan
FIFA es totalmente consciente de esta situación y su mayor arma son precisamente los derechos de transmisión de la Copa del Mundo, siendo éste un negocio redondo.
Si nos remontamos al Mundial de Brasil 2014, este torneo generó cuatro mil millones de dólares en ingresos totales para la FIFA, un 66% más que Sudáfrica 2010.
La ganancia de la FIFA por el Mundial que está por realizarse estará rondando en los tres mil 500 millones de dólares, y por derechos de transmisión en televisión aproximadamente dos mil 800 millones de dólares. El resto de los ingresos estarán repartidos entre los socios comerciales y/o patrocinadores.
Investigaciones de mercado indican que aproximadamente 900 millones de personas encendieron su televisión para ver el Mundial, al menos un minuto, y unos 500 millones se detuvieron frente al televisor 25 minutos para observar los partidos. Las estadísticas indican que, en los últimos dos Mundiales, el promedio aproximado de audiencia en cada partido es de 180 millones de personas.
Para Rusia, la expectativa es de 230 millones de personas viendo cada partido.
Sin duda, las ganancias o los ingresos se leen espectaculares, pero también es una realidad que la FIFA debe gastar en la operación del torneo y créanme que no es nada barata, ya que las federaciones participantes reciben aproximadamente 650 millones de dólares. Tenemos que sumar los premios de 90 millones de dólares. Si se analizan los números, aproximadamente cada jugador le cuesta a la FIFA 85 mil dólares por el torneo.
El éxito económico que tiene la Copa del Mundo es, sin duda, un factor muy importante para el crecimiento del deporte mundial, impulsando —sin duda alguna— al del país sede, en cuanto a infraestructura y capacidad monetaria. El organismo que rige al futbol en el planeta Tierra destinará para el próximo año cuatro mil 300 millones de dólares, los cuales servirán para proyectos de desarrollo de cada una de las federaciones.
Conforme avanzan los días y el Mundial se acerca, la economía del futbol seguirá creciendo, los países calificados estarán generando una economía local importante con los patrocinadores de cada una de las selecciones y no se diga de los patrocinadores globales, los cuales tendrán la oportunidad invaluable de comunicar, vender y posicionar aún más sus marcas. En México, aunque tendremos un semestre bastante especial, teniendo elecciones a mitad de año, el futbol se llevará la mayor atención y —sin duda— las mayores ganancias.
@husseinforzan
