Si Andrés Manuel investiga a los altos funcionarios señalados en trabajos periodísticos, su paso por la Presidencia de la República provocará un auténtico cambio.

No es cualquier cosa. No se trata de uno o dos escándalos. Sino del modus operandi de la generación del atraco.

En Animal Político jalaron otro hilo de la enorme y complicada madeja.

Resulta que en esta administración amloísta ascendieron a tres personas.

Miguel Ángel Lozada fue nombrado director de Pemex Producción y Exploración; Héctor Salvador Salgado, subdirector de Coordinación Operativa y Comercial de Pemex-PEP, y Luis Galván, gerente de Operación y Control Financiero, Procesos Industriales y Logística.

No son famosos. Pero para las compañeras de Animal Político y Mexicanos contra la Corrupción sus nombres resultaron conocidos. Se percataron que forman parte de lo que indagaron en la Estafa Maestra. Estos señores firmaron convenios con universidades públicas por 348 millones de pesos que fueron a parar a 17 empresas irregulares o fantasma.

Publicaron el dato y dieron el siguiente paso.

Nayeli Roldán (quien junto con Manu Ureste y Miriam Castillo realizaron el multipremiado reportaje) acudió a la conferencia mañanera.

Hizo la pregunta, que como profesional que es, tenía que realizar.

Andrés Manuel respondió. Revisó el tema.

Ayer anunció que pedirá la separación del cargo de estos tres hombres. Y lo más importante, que los investigará.

Inmediatamente, la secretaria de la Función Pública indicó que no habrá impunidad y que fortalecerán los mecanismos de coordinación e intercambio de información.

En este espacio escribí que el hartazgo social con Enrique Peña Nieto se debía, en gran medida, a la revelación de actos de corrupción y abusos durante su gestión. Y que el enojo popular fue creciendo cuando los reportajes que los expusieron no encontraron eco en el Estado mexicano.

Si ahora la titular de la SFP, Irma Eréndira Sandoval, y el fiscal general, Alejandro Gertz Manero, le dan seguimiento jurídico a la labor de colegas que develaron la maquinaria criminal, será un éxito para AMLO.

Y si le siguen con los demás asuntos, —#Odebrecht, #GobiernoEspía, #ElCártelNegro, #PemexRIP, #PanamaPapers, etcétera—, pasará a la historia como el Presidente que desea ser recordado.

Es eso o la misma simulación de sexenios anteriores.

RAZONES Y PASIONES: Hablando de justicia y cambio real, el nuevo gobierno ya podrá concluir el trámite (que dejó trunco Peña) de reconocer la competencia del Comité de Naciones Unidas contra las Desapariciones Forzadas para recibir y examinar casos individuales.

Con EPN se frenó el proceso. Por ello, familiares de jóvenes desaparecidos presentaron una demanda de amparo que acaban de ganar.

Todavía existe el riesgo que la Secretaría de Relaciones Exteriores impugne.

Aunque lo lógico sería que todo eso quedara en prácticas del pasado.

Además, el propio López Obrador, en campaña y en encuentro con víctimas, dijo que aceptaría el apoyo
internacional.

Su canciller, Marcelo Ebrard, hoy tiene la posibilidad de concluir tan importante avance para la protección de derechos humanos.

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