Esta tarde, 208 estudiantes de las licenciaturas en Enfermería y Enfermería y Obstetricia del Instituto Politécnico Nacional (IPN) tomaron el juramento para enfermeras de Florence Nightingale para comprometerse a una práctica profesional ética con sus pacientes.
Tras una serie de escándalos en los cuales residentes y estudiantes de Medicina se tomaron “selfies” en sus lugares de trabajo, enfermeros recién graduados recitaron en la ceremonia de “Paso de la luz” el juramento de Florence Nightingale, fundadora de la enfermería moderna.
A través de este juramento se comprometieron a llevar una vida digna, ejercer su profesión honradamente y dedicar su vida al bienestar de las personas confiadas a su cuidado.
“Me abstendré de todo cuanto sea nocivo o dañino, y no tomaré ni suministraré cualquier substancia o producto que sea perjudicial para la salud. Haré todo lo que esté a mi alcance para elevar el nivel de la enfermería y consideraré como confidencial toda información que me sea revelada en el ejercicio de mi profesión, así como todos los asuntos familiares en mis pacientes”, señala el compromiso.
En marzo de este año, dos residentes del área de patología clínica de la clínica 25 del IMSS al noroeste de la ciudad de Monterrey, Nuevo León se tomaron dos fotografías con un pie que le había sido amputado a un paciente y lo que parecía ser un estómago, y las colgaron en Twitter. Ambas fueron despedidas.
A raíz de esta situación, la delegación estatal del IMSS en Coahuila anunció que el uso indebido de los teléfonos inteligentes durante el horario de trabajo se podría sancionar hasta con la rescisión de contrato.
En 2015, una estudiante de Odontología de la Universidad del Valle de México en Reynosa, Tamaulipas, se tomó una selfie en la que aparecía una anciana en condición delicada de salud y de la cual la joven aseguró que estaba agonizando.
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