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Los delitos cometidos por los ex líderes del narcotráfico Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, y Jorge Costilla, El Coss, no quedarán impunes en México, a pesar de su extradición a Estados Unidos, pues los procesos penales en su contra continúan, asegura José Alberto Rodríguez Calderón, subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales de la PGR, en entrevista con EL UNIVERSAL.

Señala que la extradición de 13 delincuentes no fue una medida adoptada debido a la presión por la fuga de El Chapo , y que todo fue en cumplimiento a las obligaciones internacionales que tiene el gobierno federal.

¿Por qué se realizó la entrega colectiva de 13 personas al gobierno de Estados Unidos?

—Lo que vieron no es producto de la casualidad ni un hecho excepcional, fue la culminación de todo un proceso de trabajo jurídico de varios años, donde los abogados que dependen de la Subprocuraduría Jurídica han laborado de manera constante para lograr la entrega de estas 13 personas.

¿Qué va a pasar con los procesos que tienen pendientes en México La Barbie y El Coss?

—En el caso de Édgar Valdez, duró cuatro años su entrega a Estados Unidos por vía de extradición, fue el tiempo que necesitó la justicia mexicana para poder obtener toda la información y medios más importantes de prueba; ya no era indispensable para nosotros mantenerlo en El Altiplano.

Los procesos penales en México seguirán su curso hasta que venga la sentencia. Ya todo lo que requeríamos de información de ellos para otras investigaciones fue agotado. El tiempo que estuvieron aquí fue el necesario para que la justicia mexicana profundizara en las investigaciones.

No estamos violando ningún aspecto de legalidad, estamos dando cumplimiento a una obligación internacional que México tiene.

¿Son suficientes los cuatro años que La Barbie estuvo en prisión?

—El hecho de que no se encuentren en México no obstaculiza el trámite legal, sus delitos en el país no quedarán impunes. Legalmente la Cancillería es la oficina que niega o autoriza las extradiciones.

¿Tenían conocimiento que los extraditados estarían planeando su fuga de El Altiplano?

—No, lo que vieron es la punta del iceberg; lo que viene abajo son meses y años de mucho trabajo jurídico. Cuando legalmente los extraditables ya no tienen ninguna impugnación o recurso legal qué interponer, entonces el procedimiento nos permite ejecutar la extradición.

¿Fue presión internacional por la fuga de Joaquín Guzmán Loera?

—Como lo dije en un principio, esto no es obra de la casualidad. No hay presión de nadie. Son las conclusiones legales de cada caso.

¿Cuántas extradiciones se tienen en puerta?

—Tenemos algunas pendientes. Están en trámite, la temporalidad es muy difícil establecerla. En lo que va del año hemos extraditado a 51 personas, 49 han sido a Estados Unidos, uno a Holanda y otro a Eslovaquia.

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