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La Comisión Nacional de Seguridad (CNS) comunicó a la Cámara de Diputados que —en colaboración con la Comisión Intersecretarial para la Prevención y Combate a la Economía Ilegal— se diseñan estrategias para la prevención, investigación y persecución de ilícitos contra el transporte ferroviario de carga en el país.

En un documento señaló que la Policía Federal es la institución encargada de coordinar los esfuerzos orientados a prevenir, disuadir y evitar incidentes relacionados con la detención ilegal de trenes, prevenir el vandalismo a las vías férreas y el combate al robo de mercancías.

En el documento describió que cada una de estas acciones se apega al respeto irrestricto de los derechos humanos, con especial énfasis en la protección de la vida e integridad de la ciudadanía.

Así respondió la CNS a un dictamen aprobado por la Cámara de Diputados, el pasado 29 de abril, donde se le solicitó a la Secretaría de Gobernación a que, en el ámbito de sus atribuciones, refuerce las acciones de coordinación entre la Federación, los estados y municipios, que permitan garantizar la seguridad pública en el servicio del transporte ferroviario del país.

Los legisladores expusieron que la Asociación Mexicana del Transporte Intermodal (AMTI) ha establecido que la región donde se registra el mayor número de robos a trenes es la del Bajío, debido al crecimiento urbano que ha propiciado la instalación de comunidades alrededor de las vías ferroviarias, afectando directamente a las industrias establecidas en Guanajuato y Querétaro.

En México, refirieron, este transporte constituye un elemento para el desarrollo económico; por ello, señalaron, es necesario atender los problemas de seguridad en las vías, para no perder las inversiones existentes.

En su respuesta, la CNS aseguró que, a través de la Policía Federal, atiende la problemática que aqueja al servicio público del transporte ferroviario del país, en relación con la vertiente vinculada a la economía ilegal, con el objetivo de reducir el índice delictivo.

Mencionó que la Policía Federal realizó un análisis de la situación que aquejaba al sector e identificó problemáticas como relevos de tripulación de los trenes fuera de los patios de maniobras, a causa del término de turno; patios de maniobra sin seguridad perimetral, y cargas sin etiquetar o identificación por parte de las compañías contratantes.

También, empresas de seguridad privada sin protocolos de actuación; asentamientos irregulares en el derecho de vía y falta de limpieza en las vías ferroviarias (localización de materiales de desperdicio, llantas y tubos que son empleados para detener y permitir el vandalismo en los trenes).

Estas condiciones, afirmó la CNS, favorecerían el robo de la carga en este transporte, principalmente al paso y disminución de la velocidad en las vías ubicadas en zonas urbanas y marginales, como en los municipios de Apaseo, Cortazar, Celaya, Pénjamo y Silao, en Guanajuato, principales cruces de tránsito de ferrocarriles.

Resaltó que, desde 2015, la Policía Federal y el gobierno de Guanajuato implementaron el Operativo Ferrocarriles Seguros, con el objetivo de reducir los ilícitos a este medio de transporte.

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