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Oaxaca.— La Ciénega es una tierra pródiga. En este municipio cercano a la capital con alrededor de 3 mil habitantes, con vastos plantíos de maíz, frijol, calabaza, caña, flores y verduras, 90% de la población emigra a Estados Unidos de Norteamérica y muchas familias tienen la doble nacionalidad.
Aquí, las opiniones sobre el triunfo de Donald Trump como próximo presidente estadounidense están divididas. “Va a regresar el racismo; yo lo sufrí en carne propia. Lamentablemente ese candidato basó su campaña en el odio”, afirma Emanuel Hernández Castellanos un mexicano-americano, quien hoy es presidente municipal y cuya familia tiene la doble nacionalidad.
En cambio, doña Gregoria Antonio León cree que lo dicho por Trump fue “puro ruido de campaña, la verdad es que los norteamericanos son buenas personas. Yo tengo muchos años de ir y venir y no he sufrido nada; mi marido que se fue ‘mojado’, consiguió su nacionalidad y después la mía. Hasta tenemos un negocito en Nueva York”.
La Ciénega se localiza a unos 25 kilómetros al sur de la capital, cerca de la carretera federal 131, Oaxaca-Puerto Escondido; según el Censo 2010 del Inegi, cuenta con 2 mil 785 habitantes, de los que 69.9% se encuentra en pobreza, pero la mayoría de sus calles están pavimentadas y hay varios negocios de cambio de dólares, así como de trámite de visas para EU. Las casas son de material macizo de construcción.
“Acá es prácticamente una tradición irse pa’l norte; todos tenemos un familiar allá en Estados Unidos, hay familias enteras”, cuenta un mototaxista de la localidad.
Es el caso de doña Gregoria. Hace unas tres décadas emigró su esposo Rogelio Fabián Méndez a Nueva York, donde trabajó en una pastelería y en restaurantes; tras una amnistía logró su nacionalidad y posteriormente llamó a su esposa; ella desde hace 15 años va y viene.
El matrimonio tiene tres hijos, ciudadanos norteamericanos que radican allá. “Yo a ese país le debo mucho; estamos felices. Aquí ya ve cómo está la economía y gracias a Estados Unidos nos ha ido bien; nos ha abierto las puertas y el que va y trabaja, gana y manda su dinerito.
De Trump, cree que “es buena persona; un americano incluso nos trata mejor que un paisano, muchos de nuestros paisanos son racistas, hay envidias. Pero ellos nos tratan bien. Pienso que no van a echar a todos los mexicanos de a montón; yo no tengo resentimientos contra ellos, me han ayudado; pienso que él va a ayudar a la gente”.
El presidente municipal, piensa distinto. “Acá se vive del campo, pero si no hubiera remesas, no funcionaría… Nos pegó que ese señor [Trump] haya ganado; el racismo ya se había combatido, pero este señor lo vuelve; es una lástima”, expone.
De acuerdo con el Instituto Oaxaqueño de Atención al Migrante, en Estados Unidos hay al menos un millón y medio de migrantes originarios del estado, la tercera parte de ellos sin documentos. Radican principalmente en California, Washington, Colorado, Arizona, Texas, Florida, Nueva York, Nueva Jersey, Georgia e Illinois.
Según el Banco de México, de enero a septiembre Oaxaca recabó 1045.5 millones de dólares en remesas y es el séptimo estado por este tipo de ingresos. En periodo similar pero del año pasado fueron 980 millones de dólares. Los estados con mayor recepción de dólares son Michoacán, Jalisco, Guanajuato, Estado de México, Puebla, Guerrero y Oaxaca.
