El primer ministro francés, Manuel Valls, advirtió al Partido Conservador británico que no le corresponde imponer su propia agenda en el "brexit" y pidió rapidez en la aplicación del resultado del referéndum del pasado jueves.


"Entiendo que el Reino Unido quiera defender sus intereses, pero Europa también debe pelear por los suyos", dijo Valls ante la Asamblea Nacional en un discurso en el que insistió en que no hay espacio para la ambigüedad porque se necesita estabilidad, "principalmente en los mercados financieros".


Valls subrayó que, tal y como lo ha solicitado el Parlamento Europeo, el Reino Unido debe activar cuanto antes la cláusula 50 de retirada de la Unión Europea (UE) y avanzó que, "si los británicos quieren mantener el acceso al mercado único, tendrán que respetar las reglas en su conjunto".


El primer ministro admitió que la decisión de abandonar la UE ha abierto una fractura y ha sido "un electrochoque", pero instó a tomarse esta crisis como la oportunidad de emprender una "gran transformación", en materia de seguridad principalmente.


"La amenaza terrorista, la crisis migratoria, ponen el espacio Schengen a prueba. Debemos retomar el control. (...) Hace falta ir más lejos y controlar de verdad nuestras fronteras exteriores, pero no saliendo de Schengen, sino actuando para que las reglas que rigen ese espacio se apliquen firmemente", apuntó.


Para el jefe del Gobierno francés, Europa "debe igualmente asumir un esfuerzo defensivo digno de ese nombre", imponerse mejor y proteger el interés de los europeos.


"Basta de ingenuidad", alegó ante los diputados, a los que solicitó firmeza en la negociación del tratado comercial y de inversiones entre la UE y Estados Unidos y alegó que el texto actual "no es aceptable".


Valls pidió que Europa invierta "masivamente en favor del crecimiento y del empleo", prosiga la armonización fiscal y social y refuerce la eurozona y su gobernanza democrática, siendo ofensiva allá donde su eficacia sea útil y sabiendo "borrarse cuando las competencias deban quedarse a nivel nacional o regional".


"Es hora de superar las oposiciones estériles. Europa no es el fin de los Estados", añadió en una alocución en la que exclamó que también es necesaria una Europa que decida rápido y lamentó que, a fuerza de no hablar de Europa, "los populistas no tienen ninguna dificultad para contar cualquier cosa".


Valls advirtió, en referencia a la petición del partido ultraderechista francés Frente Nacional (FN) de hacer una consulta similar a la británica, que "un referendo no es manera de "desembarazarse de un problema".


"La cuestión que se plantea a Francia no es la de salir de Europa, sino de refundar el proyecto europeo", añadió, no sin dejar claro que el proceso de refundación, aunque es urgente, "tomará tiempo".


jlcg

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses

[Publicidad]