Durante el debate de esta noche en Houston, Texas, los precandidatos republicanos criticaron una vez más el plan de salud del gobierno de Barack Obama, conocido como Obamacare.

Mientras algunos aseguraron que borrarían por completo el programa, otros señalaron que conservarían algunos de los términos del plan.

El senador Marco Rubio aseguró que es necesario deshacerse del plan de salud de Obama, “por un sistema en el que los estadounidenses manden y tanto empleados como empleadores puedan escoger el tipo de plan que deseen tener”.

“Obamacare no sólo es malo para la salud sino para la economía. No es una buena ley porque mata al empleo y lo reemplazaré por algo mejor”, afirmó.

El magnate Donald Trump aseguró que haría algo mejor que el Obamacare, “pero quiero conservar las condiciones preexistentes”, aunque no especificó cuáles. “Las compañías de seguros quieren que todo siga igual. Son amigos míos, tengo amigos ahí, y están haciendo una fortuna”, aseguró.

“Tendremos seguro médico privado, pero no permitiré que la gente se muera en las calles. Esa gente va a ser atendida”, aseguró Trump. Al ser cuestionado por su rival Ted Cruz sobre quién pagaría la cobertura de ese plan de salud, el magnate evitó contestar.

El gobernador John Kasich, se unió a Rubio en la idea de eliminar por completo el plan de Obama. “Lo borraría por completo y tomaría recursos federales para devolver dinero a los estados y me aseguraría de que los trabajadores pobres no pierdan sus casas cuando llegue la factura del hospital”, declaró.

El neurocirujano retirado, Ben Carson, señaló que el plan de salud “no es un privilegio de los ciudadanos, es una responsabilidad del gobierno”.

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