Damasco.— La mitad de las alrededor de 40 mil personas que corren el riesgo de morir de hambre en la ciudad siria de Madaya son niños, de acuerdo con cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

La situación en esa ciudad sitiada es cada vez más dramática, incluso después de que el gobierno sirio diera su consentimiento para trasladar equipos de ayuda a la zona. Los lugareños afirmaron ayer que, de momento, no ha llegado ningún convoy de ayuda con suministros.

Por su parte, los médicos que reciben apoyo de la organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) en Madaya identificaron a 250 personas con desnutrición aguda severa, incluyendo 10 personas con necesidad de hospitalización inmediata. “La situación empeora día a día, no podemos esperar más”, dijo a DPA Masen Burhan, del comité humanitario de Madaya. “La ayuda tiene que llegar lo antes posible; de lo contrario, esto será una catástrofe”.

El gobierno sirio dio el jueves su autorización, según informó la ONU, para transportar suministros a la urbe. Un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) dijo que, por su tamaño, los convoyes podrían llegar a la ciudad recién el domingo.

Además, se autorizó el envío de ayuda a las ciudades de Fua y Kefraya, situadas en el noroeste de Siria y ocupadas por los rebeldes.

Unas 40 mil personas se encuentran desde hace aproximadamente seis meses atrapadas en Madaya, sitiada por las tropas del régimen sirio y la milicia chiíta libanesa Hezbolá, de acuerdo con el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. La última vez que empleados de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja Siria pudieron acceder a la ciudad fue en octubre.

La MSF afirmó estar “extremadamente alarmada”, ya que, desde diciembre, unas 23 personas habrían muerto de hambre en un centro de salud, entre ellas seis niños. Madaya es una “cárcel al aire libre” para las personas que reciben muy poca comida desde hace meses, dijo.

Los activistas informaron que las personas están comiendo hojas, perros y gatos.

Por otra parte, el Observatorio denunció que ocho niños y tres mujeres murieron en un ataque aéreo de la coalición liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico (EI) en el pueblo de Hasima, en el norte de Siria. Según el Observatorio, allí se estaban produciendo combates entre el EI y fuerzas dirigidas por los kurdos sirios.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses