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Vecinos de las colonias aledañas a la avenida San Jerónimo denunciaron una serie de abusos e irregularidades por parte de varios de los negocios ubicados sobre esta saturada arteria.
Los comercios, que van desde vinaterías, tiendas de auto servicio y restaurantes —a decir de los denunciantes— no cuentan con los permisos para operar.
Los vecinos señalan también omisión de las autoridades de la delegación Álvaro Obregón.
Explican que los comercios se han apoderado de las banquetas y otros espacios públicos que usan como sus estacionamientos, lo que complica el libre tránsito de los peatones.
Los afectados dieron a conocer a EL UNIVERSAL que a raíz de las irregularidades incluso ya solicitaron el apoyo de las autoridades de la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT).
El tránsito vehicular también se complica y provoca que en horas pico el tiempo promedio para llegar a la glorieta del periférico —recorrido de no más de 3 kilómetros— dure entre 30 y 40 minutos.
“Todo es un caos; impera la anarquía por la pasividad de las autoridades. Hemos denunciado, pero nadie nos hace caso, la corrupción es muy grande y aquí ésta el ejemplo.
“Basta que las autoridades junto con Protección Civil se den una vuelta por aquí y clausuran todos. No vemos las licencias para las ventas de licor a la mano, no tienen los señalamientos de salidas de emergencia y lo peor, están a escasos 100 metros de escuelas primaria y preprimaria, algo que es prohibido y este es sólo uno de tantos negocios”, comentó Samuel Pineda, vecino de la colonia Jardines del Pedregal, una de las afectadas por los comercios.
“Se adueñan del espacio público”. Los afectados revelaron que la vinatería Alianza/Club Gourmet, ubicada en San Jerónimo 369, rompió la acera para poder estacionar sus vehículos en batería, lo que obliga a los transeúntes a caminar sobre la avenida. En el lugar se han registrado ya tres atropellamientos, además de que no hay señalamientos para el cambio de sentido de las calles.
En este lugar, aparentemente todos están por encima de la ley ya que los empleados de las oficinas de la Semarnat, ubicada en San Jerónimo 478, utilizan el camellón debajo de tres torres de alta tensión de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) como estacionamiento.
Para apartar sus lugares le ponen una cadena e incluso utilizan a un “franelero” que cuida los autos.
“Además son prepotentes, hemos tratado de dialogar con ellos, pero son agresivos. Nadie entiende de razones y no es justo, queremos vivir en un país donde se respeten las leyes y todos podamos transitar de manera pacífica, pero la omisión de las autoridades y la corrupción permite todo eso”, continuó el entrevistado.
Los inconformes ya acudieron a la autoridad competente: a principios del año pasado se acudió a la procuraduría ambiental para denunciar las irregularidades que han detectado, al caso le asignaron el folio 19349 y también acudieron con el Invea y se abrió el folio 2748, la cual, dijeron, se anexó a las 19455 y 19456 de la PAOT y ante el Invea con folios 2755 y 2756.
