Cuatro presuntos narcotraficantes –tres hombres y una mujer—quienes empezaron a operar en el Pueblo Mágico de Parras de la Fuente, fueron descubiertos y arrestados por efectivos de la Policía del Estado “Fuerza Coahuila”, quienes les requisaron siete armas, marihuana “en greña” y 160 envoltorios de narcóticos que iban a vender a adictos.

Los detenidos, de 27 a 30 años de edad, traían media docena de armas y droga (cristal, metanfetaminas y marihuana) etiquetada con la Leyenda “Sinaloa”. Ellos fueron quienes refirieron pertener al Cártel de Sinaloa.


Según dijeron a los policías pretendían instalarse en Parras, ubicado en la región sureste de Coahuila, para realizar sus actividades delictivas.

Además, se les encontró una placa y una identificación apócrifa de la Policía Investigadora, para hacerse pasar por uniformados, reportó la Comisión Estatal de Seguridad (CES).

De inmediato, agregó en un comunicado de prensa, los detenidos fueron puestos a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR) y son investigados por el delito de delincuencia organizada, portación de armas de uso exclusivo del Ejército, posesión de drogas y demás que les resulten.


Resultado de un trabajo de inteligencia, ordenado en el Grupo de Coordinación Operativa, se detectó a esta célula del crimen organizado que pretendía establecerse en este municipio, destacó la CES.

Fue en la Calzada del Márquez y Agustín Churra, de la Colonia Mano con Mano, cuando oficiales que circulaban a bordo de unas patrullas se percataron de un vehículo con reporte de robo, lo cual verificaron en el sistema de la red policial.

El automóvil todoterreno es marca Honda, de la línea CRV, con placas de circulación FKU6049, del Estado de Coahuila, donde viajaban tres personas que portaban armas de fuego, cuyo conductor al ver a las unidades policiales aceleró e intentó darse a la fuga.

Sin embargo, no logró escapar porque fue detenido más adelante, el chofer aseguró llamarse Julio César “N”, de 30 años de edad y el copiloto Rolando “N”, de 30 Años de edad, ambos con domicilio en el municipio de Ramos Arizpe.

En tanto que su compañera que iba en el asiento de atrás, Elia Olivia “N”, de 27 Años de edad, según refirió vive en la ciudad de Torreón.

Al hacerles un revisión corporal preventiva (“cacheo”) e inspeccionar el vehículo, los oficiales localizaron un arma larga, cinco armas cortas y 111 dosis de droga lista para su venta.

Los agentes incautaron 74 envoltorios con una substancia granulada conocida como cristal, con la leyenda “Sinaloa” (impresa) y 37 envoltorios de marihuana, una placa tipo charola, una identificación apócrifa de la Policía Investigadora y dinero en efectivo.

Poco después en un lavado de autos, de la calle Matamoros de la zona centro de Parras, los mismos elementos de “Fuerza Coahuila” aprehendieron a Mario Alberto “N” de 29 años de edad.

A este sujeto, quien también dijo pertenecer al Cártel de Sinaloa, le requisaron un arma corta calibre .22, una pistola tipo revólver, 49 envoltorios que en su interior contienen pequeñas piedras con características, la metanfetamina, con la leyenda “Sinaloa” (impresa).

Le incautaron también tres bolsas con hierba verde y seca con características a la de la marihuana y una de plástico color amarillo con marihuana en greña.

En ambas acciones incautaron siete armas y 160 envoltorios de drogas, además de lo mencionado.

Tres de los detenidos, agregó la Comisión, quedaron a disposición del Agente del Ministerio Público Federal (MPF) de la Procuraduría General de la República (PGR), como presuntos responsables del delito de Delincuencia Organizada y portación y/o posesión de armas de uso exclusivo del Ejército.

Asimismo, se les imputan la flagrancia de posesión de vehículo con reporte de robo y de narcóticos con fines de comercio o suministro.

En tanto que el cuarto sujeto fue puesto a disposición del Ministerio Público (MP) del Fuero Común de la Procuraduría General de justicia del Estado (PGJE), que se encargará de efectuar las pesquisas para fincar las responsabilidades que le resulten al detenido.

Todas las acciones de seguridad como éstas, son resultado del trabajo que realizan las corporaciones policíacas dependientes del Grupo de Coordinación Operativa, cuyo objetivo primordial es, continuar sacando la droga de las calles.

“El propósito es evitar que niños, jóvenes y adultos sean enviciados por los narcotraficantes y les arruinen la vida a ellos y sus familias”, remarcó la Comisión Estatal de Seguridad.

cfe

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